El Presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, envió ayer una advertencia a las FARC, a quienes dijo que "el tiempo y la paciencia son factores finitos" en el proceso de paz, y que se "han vuelto críticos".
"El tiempo y la paciencia de los colombianos y la mía son factores finitos. Tienen sus límites y se han vuelto críticos. El tiempo comenzó a jugar en contra del proceso de paz", señaló Santos en un discurso.
El Mandatario subrayó que la gente, "entre más avanza el tiempo y menos avanza el proceso, menos cree en la posibilidad de lograr los acuerdos".
Los diálogos de paz, que se iniciaron en noviembre de 2012, pasan actualmente por su "peor momento", según reconoció el jefe del equipo negociador del Gobierno, Humberto de la Calle, en una entrevista concedida el pasado domingo.
A esa coyuntura se llegó tras una ola de ofensivas de las FARC contra los miembros de las Fuerzas Armadas y de la Policía, así como contra la infraestructura petrolera, lo que ha causado graves daños en el medio ambiente.
Todo ello ha generado en la sociedad colombiana un descenso del apoyo al proceso de paz que ha llegado a su nivel más bajo desde que se iniciaron los diálogos.
Durante su discurso de ayer, Santos señaló que ya le han dicho a los interlocutores de las FARC que es necesario recuperar la confianza de la sociedad, algo que es "fundamental" para que los diálogos lleguen a buen puerto. Para conseguirlo, el Mandatario reclamó "hechos" y "avances específicos".
"Por eso he dicho que el cese al fuego bilateral y definitivo, que está dentro de los acuerdos generales como objetivo, lo debemos negociar a la mayor brevedad posible", apostilló Santos.
Ese alto el fuego por ambas partes ha sido una de las reivindicaciones que han hecho las FARC desde el inicio del proceso, y el miércoles, tras anunciar que iniciarán una tregua unilateral el próximo 20 de julio, volvieron a solicitarlo. Sin embargo, Santos dijo que para llegar a ello tiene que "verificarlo, tener todas las garantías, saber cómo se administra y no es cosa fácil".