Una historia singular de esfuerzo es la que vive el joven mehuinense Víctor Andrés Pulquillanca Parra, estudiante del octavo básico del Colegio Austral de Valdivia. El muchacho de 14 años es un destacado futbolista infantil, que hace poco recibió el premio al goleador del pasado campeonato comunal, aunque pocos saben que se levanta temprano de lunes a viernes para viajar desde Mehuín hasta Valdivia para estudiar. Luego se va a entrenar, ya sea con el equipo de fútbol de su colegio o bien con la Escuela de Fútbol de la Universidad Austral y después viaja de regreso a Mehuín, para llegar a su casa pasadas las 10 de la noche. Es en los viajes cuando aprovecha para estudiar sus materias.
Este joven delantero sueña con llegar a ser futbolista profesional. Reconoce que los estudios no son su fuerte, pero que el fútbol es su pasión y eso mismo lo motiva a afrontar la vida con mente luchadora.
¿Viajas todos los días desde Mehuín a Valdivia para estudiar?
-Todos los días. Antes estudiaba en la Escuela Valle Mariquina y me vine para acá. Tengo permiso para llegar a las 9 y media. En Mehuín me levanto a las 7 y a las 7.30 pasa el primer bus, que tengo que tomar para venir a clases. Me demoro una hora y media.
¿Por qué quisiste hacer este esfuerzo?
-Porque creo que estoy en un buen colegio y quería salir de San José, además quería estar en el campeonato de Valdivia, porque es más competitivo.
¿Cómo llegaste a estudiar a tu actual colegio?
-Es que yo juego en la Escuela de Fútbol de la Universidad Austral y el entrenador Pablo Barría, que también es profesor del colegio, me invitó a venir a estudiar becado.
¿Cuándo empezaste a jugar al fútbol?
-Tenía 10 u 11 años. Antes no me llamaba la atención jugar fútbol, pero mi papá y mis tíos todos jugaban y salían a campeonatos, de hecho alcanzaron a jugar profesionalmente en Curicó Unido. En Mehuín no tenía ningún club, sólo jugaba cuando me invitaban. Empecé jugando al arco, después de defensa y ahora soy delantero.
¿En qué momento llegaste a la Escuela de Fútbol de la U. Austral?
-El año pasado. Yo tenía un profesor (Ricardo Valenzuela) que falleció el año pasado y me preguntó si quería jugar por un equipo de Valdivia. Él habló con el profesor Carlos Ojeda, entrené, me gustó y me quedé.
¿Viajaste al campeonato de Cúcuta en Colombia con la UACh?
-Sí. El año pasado también fui. Fue una buena experiencia.
¿Qué ha significado para ti jugar en esta escuela de fútbol?
-Ha sido importante, porque un 50 por ciento de mi formación se la debo a la escuela. Me han enseñado muchas cosas, como moverme dentro de la cancha y controlar el balón, porque antes no era muy bueno.
¿No te has cansado de tu rutina de viajes y estudio?
-Sí. Muchas veces he pensado en volver a San José, pero después digo que todo sacrificio tiene sus buenos resultados.
¿Qué crees que te ha enseñado el fútbol?
-Me ha enseñado a ser mejor persona, a entender que estar en la cancha es lo mismo que en la vida, cuando vas por la calle. El fútbol me ha enseñado a que si caigo, tengo que volver a pararme, aunque sean mil veces más.
Víctor Pulquillanca
Futbolista
El goleador del comunal escolar
Víctor Pulquillanca justamente hoy tiene un desafío grande con su equipo del Colegio Laico, cuando juegue en Los Lagos el zonal del fútbol escolar, clasificatorio para el regional que a su vez llevará a la final de los Juegos Deportivos Escolares. El joven, en la fase comunal, fue una de las figuras al anotar 25 tantos y transformarse en el goleador del certamen. Agradeció todo el apoyo que le ha entregado su familia y añadió que "jugar a la pelota me hace olvidarme de todo, relajarme".