Con apenas 11 años de edad, Javiera Paz Negrón Díaz, estudiante del sexto básico del Colegio Santa Marta, es uno de los proyectos de buen nivel que posee el Club de Gimnasia Rítmica Valdivia, entidad que desde hace cuatro años se dedica a la formación en esta disciplina.
La pequeña deportista se inició a los seis años en la gimnasia rítmica, junto a sus profesoras Rosío Alvarado y Suyai Muñoz y superó el pánico escénico y la timidez. Ella misma recuerda que en su primer campeonato no se atrevió a salir al tapete de competencia "por vergüenza", pero que poco a poco y con los entrenamientos superó esa tranca.
Javiera Negrón añadió que le resulta atractivo ver por televisión los grandes certámenes de gimnasia rítmica y que trata de imitar los movimientos de esas gimnastas. Quien sabe, tal vez algún día ella llegue a ser seleccionada nacional, como es su deseo.
¿Cómo llegaste a hacer gimnasia rítmica?
-Tenía seis años. Un día estaba en el colegio y mi mamá me quería inscribir en algún deporte. Me dio curiosidad la gimnasia y me inscribí en mi club. Me pasaron al tiro a la selección. Ahí conocí a la tía Rosío (Alvarado) y Suyai (Muñoz). Ellas me han dado confianza. Recuerdo que cuando tenía seis años fui a mi primer campeonato, me dio vergüenza y no quise pasar a hacer mi esquema. Después fui a otro torneo y ahí logré un cuarto lugar.
¿Y ahora ya no te da vergüenza competir ante el público?
-El día que me dio vergüenza pasar, no estaba mi profesora porque le tocó hacer otras cosas. Me sentí sola. Para el otro campeonato ella estaba a la entrada para que me viera, me dijo que todo iba a salir bien y que todo iba a salir bien. Ahora me da nervios, pero igual me presento.
¿Cuáles son las pruebas que realizas en la gimnasia rítmica?
-He hecho aro y cuerda. Creo que me ha ido mejor en aro porque he sacado un tercer, cuarto y sexto lugar en campeonatos.
¿Por qué te gusta la gimnasia rítmica?
-Porque es un deporte delicado y una es la que tiene que estar motivada a hacerlo, para ganar. Hay algunas chicas que sólo lo hacen por hacerlo, pero hay otras que queremos llegar lejos. Yo me tomo en serio esto.
¿Qué dice tu familia porque practicas este deporte?
-Ellos me motivan, me dicen que puedo salir bien todo lo que hago. Casi siempre me acompañan a los campeonatos. Ellos también hacían deportes: mi mamá hacía básquetbol y mi papá jugaba fútbol.
¿Eres una niña inquieta?
-De repente soy inquieta, pero cuando tengo que ir a competir me concentro en lo que tengo que hacer para prepararme. A veces me distraigo, pero trato de estar lo más concentrada posible en los campeonatos.
¿Te ves haciendo este deporte hasta más grande?
-Yo quiero llegar a ser gimnasta olímpica y representar a Chile. En los Juegos Olímpicos veo a las gimnastas por televisión y trato de imitar los movimientos, los practico y hasta me han salido algunos, como el enganche para quedar estirada y varios otros.
¿Qué destacarías de la gimnasia rítmica para invitar a otras niñas a practicarlo?
-Que es un deporte lindo y delicado y que es para niñas que estén motivadas y que deseen llegar lejos, para las que deseen superarse cada día más.
¿Es caro hacer este deporte?
-Los implementos que usamos, por ejemplo, hay que comprarlos en Santiago y sí, hay algunos que son caros. Las mallas que usamos en los campeonatos también son caras.
Un deporte que crece en la región
La gimnasia rítmica está creciendo en la región y en los últimos cuatro años han ido formándose varios clubes, en comunas como Mariquina, Lanco, Corral y Valdivia. Sobre la exigencia de este deporte, Javiera Negrón recalca que la preparación física es fundamental. "Tenemos que hacer muchos abdominales, preparación de piernas, los empeines, estar siempre con las piernas estiradas y elongamos los muslos", contó. En su club también destacan las niñas Trinidad Urrutia y Javiera Pino.
"La gimnasia rítmica es un deporte delicado y una misma tiene que estar motivada para ir a ganar". "Cuando tenía seis años fui a mi primer campeonato. Me dio vergüenza y no quise pasar".
Javiera Negrón, Gimnasta
entrevista. javiera negrón, gimnasta: