Pablo Quintana Villanueva
Con la mira puesta en que se aclare y resuelva lo más prontamente posible la situación que mantiene paralizadas las obras de construcción del puente Cau Cau, manifestaron encontrarse el senador Alfonso de Urresti y el diputado Bernardo Berger, tras conocerse la incautación del computador que usó el ex jefe de la Dirección General de Obras Públicas, Javier Osorio, emprendida este lunes por dos detectives de la PDI, según instrucción de la Unidad de Alta Complejidad de la Fiscalía Metropolitana Centro Norte.
El procedimiento formó parte de la investigación penal desformalizada por presuntas anomalías detectadas en las faenas del viaducto, que fue transferida desde la Fiscalía Regional de Los Ríos al órgano persecutor de Santiago la semana pasada. Juan Pablo Lebedina, el fiscal que estaba a cargo de las indagaciones, justificó su decisión argumentando que la ejecución de los eventuales hechos delictivos tuvo lugar en Santiago y no en Valdivia, de manera que la competencia le corresponde a la Fiscalía Metropolitana Centro Norte.
Aclarar irregularidades
El senador Alfonso de Urresti expresó al respecto, que "se deben aclarar todas las eventuales irregularidades en la construcción del puente Cau Cau, una obra que hoy se encuentra paralizada y es una vergüenza nacional".
Recordó que en abril de este año pidió la intervención del Consejo de Defensa del Estado, entidad que derivó el caso al Fiscal Nacional, el que a su vez lo remitió a la Fiscalía de Valdivia.
Subrayó que en este asunto "hay dos cosas relevantes. Una se refiere a las responsabilidades por las continuas fallas en la obra y las eventuales irregularidades cometidas por las autoridades del Ministerio. Pero la segunda y la más importante es el futuro del puente Cau Cau, donde existe la responsabilidad del ministro Undurraga por no priorizar aún la solución, perjudicando a la comunidad de Valdivia y la región de Los Ríos".
Añadió que "esta obra es el ejemplo más claro del centralismo, porque todas las decisiones respecto al puente fueron adoptadas en Santiago; donde a pesar de que la obra presentaba problemas, a nadie le importó y esto se refleja en los resultados conocidos por todo el país: un puente a medias".
"es un paso inicial"
A su turno, el diputado Bernardo Berger valoró positivamente la incautación, calificándola como "un paso inicial que da cuenta de que por fin se está empezando a investigar en serio después de tanto tiempo que hemos venido pidiendo acciones concretas. Es de esperar que este proceso pueda arrojar cuanto antes, resultados que permitan esclarecer tanta cosa poco transparente en la forma en que se ha llevado adelante la obra".
Sin embargo, el parlamentario enfatizó que la investigación "no exime en ningún caso al Mop de las respuestas que debe dar en orden a resolver el bochornoso escenario en que estamos hoy, con obras paralizadas, con falta de responsables que asuman su parte en este tema, con un complejo pero probable escenario de judicialización civil; y lo más preocupante, sin certeza de cuándo tendremos el puente terminado".
Finalmente, Berger manifestó esperar "que de una vez por todas el Mop presente las soluciones que prometió estarían ya hace meses; que resuelva de una vez por todas retomar las obras paralizadas. No queremos más aspirinas ni mesas de participación para desviar la atención, sino que lo que esperamos todos es que el puente se termine y se termine bien".
No se pronunciaron
Al intentar establecer contacto con el ex director de Obras Públicas, Javier Osorio, éste se limitó a señalar: "Yo no hablo con la prensa". Desde la Fiscalía Metropolitana Centro Norte se informó que el persecutor José Morales (actualmente a cargo de la investigación) no se referiría al asunto; y también declinó hacerlo el gerente general de Azvi, Juan Alfredo Lacassie.