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Investigadores canadienses cuestionan la efectividad de los libros de autoayuda en trastornos como el estrés y la depresión

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Hay personas que buscan en los libros de autoayuda las respuestas para enfrentar los trastornos de la salud mental. Un estudio realizado en Canadá señala que estos lectores son más sensibles al estrés y muestran mayores síntomas de depresión, lo que acusaría una falta de efectividad en estas obras.

El CIUSSS (Instituto Universitario de Salud Mental) y la Universidad de Montreal fueron los encargados de analizar el perfil de los consumidores de este tipo de publicaciones. Los resultados quedaron consignados en la revista Neural Plasticity.

"Al principio pensamos que habíamos observado una diferencia en los participantes en términos de personalidad, sentido de control y la autoestima en función de sus hábitos de lectura de autoayuda", sostuvo Catherine Raymond, de la Universidad de Montreal y autora principal del estudio.

La investigadora indicó en un comunicado que al parecer no hubo diferencias entre quienes leen o no estos libros.

"Sin embargo, nuestros resultados muestran que mientras los consumidores de ciertos tipos de libros de autoayuda secretan niveles más altos de cortisol cuando se enfrentan a situaciones de estrés, los consumidores de otros tipos de libros de autoayuda muestran una sintomatología más alta de depresión en comparación con los no consumidores", añadió Raymond.

El equipo del Centro de Estudios del Estrés Humano (CSHS, en inglés) del CIUSSS reclutó a 30 participantes, la mitad de ellos consumidores de libros de autoayuda. Los investigadores midieron varios elementos, entre ellos la reactividad al estrés (niveles de cortisol en la saliva), apertura sicológica, autodisciplina, extroversión, compasión, estabilidad emocional, autoestima y síntomas depresivos.

Los participantes fueron divididos en dos grupos: quienes prefieren los libros centrados en los problemas y los que leen publicaciones orientadas al crecimiento.

Los resultados mostraron que los consumidores que buscan la resolución de problemas tienen mayores síntomas depresivos y quienes buscan tópicos sobre el crecimiento presentaron un aumento en la reactividad al estrés.

Pese a que los autores reconocen que se requieren de más evidencias, advierten que este tipo de libros "no producen los efectos deseados", dijo Sonia Lupien, directora del CSHS.

30 lectores formaron parte de la muestra inicial del estudio realizado por especialistas de Montreal (Canadá).

US$ 10 mil millones en ganancias lograron los libros de autoayuda en EE.UU. en 2009, según datos de la investigación.

Estudio revela los temores de los padres ante el uso de los celulares

ADICCIÓN. Las preocupaciones van desde el tiempo que destinan los adolescentes a internet hasta el ciberbullying y la falta de sueño que afecta a los jóvenes.
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Pamela De Vicenzi

El uso excesivo de los smartphones y las redes sociales suele ser una preocupación frecuente en los padres, quienes en ocasiones no cuentan con las herramientas para enfrentar la adicción de sus hijos, en especial si son adolescentes.

Una investigación de la Universidad Duke (EE.UU.) indaga en los principales temores de los padres ante las nuevas tecnologías. Si bien algunas preocupaciones son más bien exageradas, hay otras que revisten mayor atención, tales como el ciberacoso o "ciberbullying" y los trastornos del sueño.

Candice Odgers, académica de Duke y una de las autoras del artículo, dijo que cada generación se preocupa a su manera de cómo los jóvenes utilizan su tiempo.

"Vemos a los jóvenes de manera constante en sus teléfonos y asumimos los efectos nocivos, pero gran parte de la investigación cuenta hasta la fecha con una historia más positiva", indicó la investigadora. Según Odgers, las vidas "online" de los adolescentes se parecen mucho a sus experiencias, las conexiones y los riesgos en el mundo fuera de internet, por lo que el uso del teléfono móvil solo plantea nuevos peligros para los jóvenes.

El estudio fue publicado esta semana en la revista Perspectives on Psychological Science.

Internet y vida social

De acuerdo a la investigación, los adolescentes que tienen una mayor vida social fuera de internet tienden a fortalecer sus relaciones a través de las interacciones en línea. En lugar de contactar a extraños, la mayoría de los jóvenes utilizan estos medios para interactuar con amigos y conocidos con los que ya se relacionan cara a cara.

Madeleine George, otra de las autoras del estudio, subrayó que el cruce entre la vida dentro y fuera de estas plataformas es "tan sorprendente" que es una "falsa distinción" separar ambos campos. Sin embargo, estar más tiempo en línea puede predecir una disminución en el bienestar de los jóvenes.

"Si los padres tienen preocupaciones sobre las interacciones cara a cara o las actividades sociales de sus hijos adolescentes, probablemente tienen más razones para estar preocupados por las actividades en línea", apuntó George.

La investigadora también se refirió a la relación entre padres e hijos dentro y fuera de las redes y remarcó que ambas instancias se reflejan entre sí. En otras palabras, si los padres mantienen una buena comunicación, esto tendrá sus frutos en las plataformas digitales.

Aspectos negativos

En cuanto a los nuevos problemas que giran en torno a la vida social de los adolescentes "digitalizados", las autoras hicieron hincapié en la fuerza que ha tomado el ciberacoso en los últimos años. Incluso las investigadoras señalan que el riesgo de sufrir este tipo de agresiones es el mismo que el bullying cara a cara.

Otra de las preocupaciones que reconocen las especialistas es la falta de sueño que sufren los jóvenes debido al uso de estos dispositivos en la noche.

A juicio de las autoras, este temor está fundado en el dato de que cuatro de cada cinco adolescentes duermen con su teléfono cerca de la cama, y que aquellos que usan el smartphone después de apagar las luces son dos veces más propensos a sufrir cansancio al día siguiente.

Las investigadoras afirmaron que es necesario profundizar en los nuevos riesgos a los que se someten los jóvenes en la era digital e hicieron un llamado a reflexionar respecto de las motivaciones de los jóvenes para llevar una vida dentro y fuera de internet.

"Tendemos a contar las horas dedicadas al uso de la tecnología en lugar de tratar de entender las razones de los adolescentes que están inmersos en el mundo digital", subrayó Odgers.

Las preocupaciones de los padres sobre los smartphones

Cantidad de tiempo

Las investigadoras de Duke señalan que los padres ponen énfasis en la cantidad de horas que utilizan los niños para interactuar desde el celular.

Vida social

Según el estudio, hay una correlación entre la vida social de los adolescentes dentro y fuera del internet, por lo que no deben entenderse por separado.

Ciberbullying

Las autoras llamaron a profundizar en los riesgos que surgen con las nuevas tecnologías, tales como el aumento del ciberbullying en los adolescentes.

Cifras chilenas del ciberbullying

Según un reportaje de La Segunda en julio pasado, la Superintendencia de Educación recibió al menos 86 denuncias por ciberacoso o ciberbullying. La publicación consignó además que hasta junio se habían ingresado 47 casos. El superintendente de Educación, Alexis Ramírez, dijo a ese medio que fue necesario crear una categoría que tipificara este tipo de casos, ya que se trata de un fenómeno emergente que no figura como tal en entidades como Carabineros y la PDI.