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Baptiste Herregods, el violinista belga que cruzó el mundo para tocar en Cifan

VÍNCULOS. Es ingeniero físico y eligió a Valdivia como puerta de entrada para conocer el continente. Acá explica sus motivaciones.
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Daniel Navarrete Alvear

Tomarse un año sabático. Esta fue la decisión de Baptiste Herregods en agosto. Había terminado sus estudios de Ingeniería Física en Bruselas cuando optó por salir de viaje para conocer otras culturas. Miró el mapa y pensó que su próximo destino debería tener un elemento fundamental: música. Es que desde los 7 años de edad y en paralelo a su educación formal, ha tomado clases de violín y no pensaba dejar su instrumento en casa a la hora de partir. Dice que por recomendación de un amigo puso atención a Chile y particularmente a Valdivia, donde está la fundación Centro Integral Familia Niño, Cifan y su programa de orquesta.

"Mi plan inicial fue salir, pero no solo de vacaciones, sino que con la meta de aportar en algo al lugar donde llegaría. Así me enteré de que otro belga, Antoine Leuridán, estaba acá con Cifan. Me dijeron que era algo muy interesante y así lo pude comprobar".

En Bélgica fue Elisabeth Jongen quien le pasó el dato a Herregods. Ella trabaja en la editorial independiente Versant Sud, que tiene a la música entre sus áreas de interés y que conoció a Cifan cuando integró una misión diplomática que visitó Valdivia.

El mejor momento

El violinista llegó a la capital de Los Ríos en septiembre. Nunca antes había salido de Europa. Decidió arrendar su casa para costear los gastos que implicaban cubrir los cerca de 13 mil kilómetros que separan Bruselas de Valdivia. Empacó el violín y un diccionario de español, ya que tampoco sabía nada del idioma.

Aunque la propuesta original era integrarlo a la orquesta Cifan como profesor, debió pasar a las filas de la sinfónica creada especialmente para la gira que realizó la banda Los Jaivas. En ese grupo también hubo integrantes de la Filarmónica de Los Ríos y de la Orquesta de Cámara de Valdivia. Por eso, su debut en la escena local fue en grande y aunque no lo había planeado de esa forma, aprovechó la oportunidad para conocer toda la región en doce días. Y fue en esos viajes entre comunas que amplió su vocabulario. "Durante la gira, cuando ibamos en el bus, no había otra opción, así que aprender español fue algo casi natural".

Después de Los Jaivas, Baptiste Herregods viajó con la orquesta Cifan en su gira a Reñaca y fue también fue parte de un flashmob en Valdivia. A través de esas experiencias, dice, pudo transmitir sus conocimientos: "Todo se volvió una lección. La música terminó siendo un pretexto para encontrar un punto en común con los niños y hablar con ellos de lo que yo hago y aprender también de ellos. Desde ambos lados ha sido una experiencia muy linda, supongo que les parece llamativo conocer a un violinista europeo. Además yo estoy maravillado de haber tenido la posibilidad de conocer el continente comenzando con este proyecto y rodeado de gente muy amable".

El violinista también destaca el valor social de la propuesta: "Lo que más me gusta de este proyecto es que no es algo nacional, es algo muy local, ayuda a la ciudad y a sus niños. Y tampoco se trata solo de que aprendan a tocar música, hay una reflexión importante sobre tener nuevas oportunidades con el arte. Es la posibilidad de tener nuevas oportunidades en la vida".

El balance

Además de los conciertos, recientemente al músico le fue asignada la responsabilidad de buscar posibles nuevos ingresos para Cifan el próximo año. Visitó algunos colegios y le contó a los escolares sobre sus vivencias con la música. "Los niños son muy activos, quieren aprender muchas cosas a la vez y a veces hay que calmarlos. De igual forma eso es bueno, porque podrían llegar a ser grandes músicos cuando sean grandes. Es bueno que tengan mucha curiosidad".

Herregods estaría en Valdivia hasta fin de año y al repasar lo que ha implicado su vida durante estos tres meses en el sur del mundo, hace un balance positivo. "Con todo lo que me ha pasado acá, solo tengo ganas de seguir descubriendo esta cultura y la de latinoamérica. Antes de venir ni sabía español, ni tampoco sabía de grandes músicos chilenos como Los Jaivas o Violeta Parra. Antes, Chile para mi solo era saber que existió alguien llamado Pinochet. Ahora es un tremendo nuevo mundo con grandes paisajes y con un pueblo mapuche con muchas tradiciones. Todo es un estímulo para seguir aprendiendo".

El próximo destino del violinista será Brasil. Y promete que al regresar a Bélgica, iniciará labores para concretar un posible intercambio de músicos locales con europeos.

"Incorporación provechosa"

Tener al músico en las filas de Cifan tiene un valor de integración. Así lo reconoce Anoine Leuridán, coordinador de la orquesta: "No habíamos pensado en que su aporte fuera nétamente como intérprete, pero llegó en el momento justo y resultó ser una muy buena experiencia tenerlo con el resto de los músicos. La incorporación fue muy provechosa".

"La música terminó siendo un pretexto para encontrar un punto en común con lo niños y hablar con ellos de lo que yo hago y aprender también de ellos".

24 años de edad tiene el violinista formado profesionalmente en Bruselas, Bélgica. Llegó a Valdivia en septiembre, sin tener mayores conocimientos del idioma español.

2 conciertos de la Orquesta Cifan fueron integrados por el músico: la gira de la sinfónica junto a Los Jaivas y las presentaciones en

Reñaca. 3 meses

lleva en Valdivia Herregods. Sus planes son permanecer en la ciudad hasta diciembre y luego seguir de viaje por el continente. Brasil sería su próximo destino.