Un estudio realizado por Sodexo reveló que el 67% de los trabajadores chilenos está satisfecho con su calidad de vida laboral, siendo los servicios legales y financieros las industrias con mayor nivel de satisfacción.

Según el Indice de Calidad de Vida Laboral, elaborado por la firma por segundo año consecutivo, un 71% de los hombres está conforme con su trabajo, versus un 61% de las mujeres. Por tipo de industrias, publicidad/marketing y Estado son los sectores con menor satisfacción, con un 55% y un 59%, respectivamente.

"El desarrollo de este estudio se basa en nuestra convicción de que para crear un valor empresarial sostenible en el tiempo, tanto las organizaciones como la sociedad deben situar a las personas en el centro de su pensamiento, siendo este el punto de inicio para el desarrollo de las estrategias de negocio y políticas laborales", explicó Thierry Guihard, director general de Sodexo.

Para desarrollar la medición se determinó que la calidad de vida laboral se compone de seis dimensiones: facilidad y eficiencia; reconocimiento; relaciones interpersonales; desarrollo personal; entorno físico, y salud y bienestar.

Con esos factores, el sondeo evaluó la satisfacción laboral de 630 empleados dependientes de entre 25 y 60 años.

Las relaciones interpersonales (75%) y la facilidad y eficiencia (74%) fueron las dimensiones con mayor satisfacción. El desarrollo personal fue, en tanto, el área con menor calificación (64%).

La principal razón que llevó a los encuestados a no valorar su trabajo con la nota máxima fueron los sueldos (51%). Luego figuran la entrega de bonos (8%), tener más tiempo libre (7%) y tener menos horas de trabajo (7%).

Con respecto a los beneficios, la sala cuna o jardín infantil y los convenios de educación son los incentivos que obtienen el mayor nivel de satisfacción (90% cada uno), seguidos por la flexibilidad horaria para estudiar (87%), el comité de bienestar (86%), el cheque restaurant (85%) y los convenios con farmacias (85%).

Los bonos de producción (75%), los convenios de salud (76%), financieros (76%) y con el comercio (76%) fueron los beneficios peor evaluados.

A partir de estos resultados, el estudio concluyó que las relaciones interpersonales en los equipos de trabajo impulsan fuertemente la satisfacción laboral. Además, existe una alta satisfacción con las condiciones que permiten a los colaboradores realizar sus tareas con facilidad y eficiencia (recursos y tecnología).

Por otro lado, existe una directa relación entre la cantidad de beneficios entregados y la satisfacción laboral. En relación a la satisfacción laboral como tal, el estudio reveló que los menores de 34 años están un 34% más insatisfechos que los mayores de 50 años. Mientras, los trabajadores de las pequeñas empresas están un 11% menos satisfechos que aquellos que se desempeñan en compañías medianas o grandes.

Al evaluar la satisfacción por tipo de cargo, el estudio demostró que los cargos bajos están un 54% menos satisfechos que los altos cargos. Al comparar los resultados de Santiago versus las regiones, el nivel de satisfacción laboral es mayor en estas últimas.

El cambio de rumbo monetario de la Reserva Federal (Fed), que esta semana anunció su primera alza de tipos de interés desde 2006, marca la salida de EE.UU. de la crisis y sitúa a la primera economía mundial en la senda de ajuste "gradual" justo cuando los emergentes dan señales de debilidad.

Los mercados habían descontado en gran medida la subida de tasas de interés en EE.UU. de un cuarto de punto, que dejó las tasas de referencia entre el 0,25% y el 0,50% como resultado de las señales "bien telegrafiadas" de la Fed, indicó el banco de inversiones Goldman Sachs en una nota a sus clientes. "Creemos que la decisión de la Fed supone un ajuste cauteloso, con la mirada puesta sobre la inflación y los mercados financieros", apuntaron los analistas de Goldman Sachs. El banco de inversión remarcó como clave la "flexibilidad" mostrada por la titular de la Fed, Janet Yellen, y su insistencia en que el futuro del proceso de ajuste será "gradual".

Pese a que los analistas coinciden en que el anuncio no supuso sorpresas, desde dentro del organismo se reconoce lo excepcional del periodo previo.

Tras divulgarse la determinación, Yellen subrayó que "esta acción marca el final de un periodo extraordinario de siete años de tipos cerca de cero para apoyar la recuperación de la economía tras la peor crisis financiera y recesión" en 80 años en EE.UU.