Salvavidas de Mehuín renuncian por falta de recursos para su labor
AFECTADO. Pablo Garcés, rescatista, es uno de los que deja el cargo.
Garcés dijo haber presentado precisamente su renuncia ayer al municipio de San José de la Mariquina, donde- a su juicio- "no hay interés por mejorar las precarias condiciones de trabajo de un salvavidas, al que siguen mirando como una persona que va a la playa a mirar y tomar el sol".
Dijo que de cinco salvavidas, ahora solo quedan tres: uno para la playa de Cheuque, otro para Pichicullín; y un tercero para la playa grande de Mehuín, que tiene una extensión de 2 kilómetros y que solo cuenta ahora con tres prevencionistas de playa, pero que no "están autorizados por la Armada para participar en el rescate de personas en el mar".
En el municipio sanjosino, Alfonso Cortés, encargado de comunicaciones, confirmó ambas renuncias, pero sostuvo que "fueron por otros motivos, porque se les paga 600 mil pesos mensuales líquidos a cada salvavidas y siempre hemos estado atentos a que los recursos estén bien".
Desde la Capitanía de Puerto de Valdivia el tenien te (Lt) Diego Valdés, dijo que "siempre hacemos fiscalizaciones y no tenemos denuncias al respecto".
Dos salvavidas del balneario de Mehuín, en la comuna de Mariquina, renunciaron a sus labores "por no contar con los recursos ideales para cumplir con nuestra labor", dijo uno de ellos, Pablo Garcés Briceño, quien pertenece además a la Agrupación Buzos de Rescate de Mehuín.