Juan Vargas Oñate
Durante tres días, los vecinos de la villa Brisas de la Ribera -en Las Animas- estuvieron bajo un fuerte olor a gas, que llegó a su punto más crítico el viernes al mediodía.
La situación afectó en especial a las familias que habitan en el pasaje Velero Helvetien y sus alrededores, desde donde la secretaria de la junta vecinal del sector, Jeannette Castro, afirmó ayer haber llamado por teléfono a la empresa Lipigas, a cargo de las instalaciones, "pero sin recibir una respuesta ideal para solucionar el problema", dijo.
La situación empeoró porque otros vecinos advirtieron también que el olor se hacía más intenso, situación que los alarmó y obligó a llamar a Bomberos, alrededor de las 20.30 horas del viernes.
Burbujas
El comandante de Bomberos, Ricardo Valverde, dijo que efectivamente había "una falla en algún punto de la instalación subterránea, de un estanque de 4 mil litros de gas, del que salían a través de la tierra, burbujas de gas".
Informó que los voluntarios de la compañías Sexta (especializada en materiales peligrosos) y Novena trabajaron hasta las tres de la madrugada de ayer para controlar el peligro y advirtió que "una situación así no se puede repetir, porque si esta vez la pudimos manejar, en otra ocasión a lo mejor no, con las consecuencias fáciles de predecir".
El comandante Valverde recomendó sacar el estanque para verificar bien la falla, lo que debería hacer la empresa Lipigas, pero que un camión que debía llegar desde Puerto Montt, aún no lo hacia, cuando Bomberos se retiró del lugar.
Parche
El presidente de la junta vecinal de Brisas de la Ribera, Patricio Barría y la secretaria Jeannette Castro, manifestaron que siguen preocupados, porque si bien ayer ya no había a olor a gas en el área habitacional, no tenían la certeza ni la comunicación oficial de Lipigas, acerca de lo que se hizo con el estanque subterráneo.
"Decían que le pusieron un parche, pero no sabemos nada oficial de la empresa", aseguraron ambos dirigentes.
Los dirigentes también indicaron que a pocos metros de donde se produjo el problema de este fin de semana, en el pasaje Velero Helvetien, hay otra instalación que hasta hace poco, estaba debajo de unas casas.
"Hoy ya están en la superficie, en un espacio como una pequeña plazuela, pero a escasos metros de otras viviendas", lo cual a juicio de los dirigentes, "parece que no cumple con la normativa legal, respecto de la distancia que debe tener una instalación como ésta, con respecto a las viviendas".
Ayer, no fue posible contactar a responsables de la empresa Lipigas, para conocer algún pronunciamiento oficial respecto a la situación de sus instalaciones en la villa animeña.
800 familias
La villa Brisas de la Ribera alberga a unas 800 familias y los dirigentes indicaron que todavía hay algunos sectores que no tienen alumbrado público, situación que les preocupa, especialmente al caer la noche, por la posible ocurrencia de acciones delictuales.
Reclamarán a la Superintendencia
Los dirigentes vecinales de la villa concurrirán mañana hasta la Superintendencia de Electricidad y Combustibles a reclamar por la situación vivida el viernes en la tarde y por la instalación que se realizó debajo de unas casas. "Pediremos saber si hubo o no fiscalización a la hora de que la empresa hiciera sus intalaciones y con qué calidad de material. Somos numerosas las familias que habitamos en el sector y no podemos estar viviendo con temor a las emanaciones de gas y sus graves consecuencias", señalaron.