Norma antifiltración
El Partido Radical de Chile rechaza categóricamente cualquier intento por entorpecer el ejercicio democrático de una prensa libre. Para el desarrollo de una sociedad laica es imprescindible contar con un periodismo capaz de enfrentar y fiscalizar al poder.
La norma recién aprobada por el Senado que sanciona las filtraciones de expedientes judiciales, aunque excluya a los periodistas de su ámbito de acción, de igual forma lesiona el interés público y la necesidad de fortalecer la democracia.
Nadie puede ser sancionado penalmente por dar a conocer información que da cuenta de irregularidades dentro del aparato estatal o el mundo privado. Es un imperativo que la sociedad conozca y se entere de lo que hacen sus autoridades y las decisiones que toman.
El PR no apoyará esta norma que ahora deberá ser discutida en la Cámara de Diputados, porque estamos convencidos de que en este momento político, más que nunca se necesita la transparencia en todas las áreas del país.
Ernesto Velasco R. Presidente Partido Radical
Respeto por las normas
Hago un llamado a los conductores particulares y de locomoción colectiva en especial lineas de taxibuses 3 y 9 de Valdivia, que en las mañanas toman calle Los Corregidores para salir a Avenida Picarte.
Por si no lo saben, esta calle desde hace tiempo tiene doble vía la cual está señalizada en esquina Avenida Picarte con Los Corregidores por tanto según entiendo sólo debiese existir una vía de salida a la Avenida y otra pista para entrar, pero los señores conductores toman Avenida Picarte en doble fila, es más, se dan el lujo de transitar por sobre las veredas para ganar tiempo.
El profesionalismo de su licencia queda por el suelo con estas malas prácticas, poniendo en riesgo a los peatones que transitan por el lugar.
Si sumamos a este hecho que durante el día transitan por esta calle como si fuesen por una pista de carreras, tenemos aquí un riesgo latente.
Hago este llamado para que en el futuro el afán de algunos no se transforme en la desgracia de otros.
Alex Barría Triviño
Nueva Constitución
Una de las llamadas reformas de fondo del actual gobierno es la denominada "Nueva Constitución". Política pública que, según las últimas encuestas de opinión pública, no figura entre las prioridades que los chilenos estimamos, debería dedicar mayor esfuerzo el gobierno. Es decir, a diferencia de lo ocurrido con la reforma educacional, no podríamos afirmar hoy que estamos frente a una reforma popular. Sin perjuicio de lo anterior, es perfectamente posible que un gobierno, en ejecución de un programa de gobierno, pueda destinar sus esfuerzos y recursos a impulsar una reforma que no coincida con las prioridades de la comunidad. Desinterés que, entre otros motivos, puede explicarse, en la poca claridad que ha caracterizado al proceso. En efecto, en el programa de gobierno nada se dice respecto al procedimiento, aspecto que recién en octubre del año pasado se intentó explicar a los chilenos, quienes evidenciamos que este proceso se extenderá por un largo período de tiempo, él que excederá, con creces, el actual mandato presidencial, lo que tampoco motivará a nuestra comunidad nacional con un tema tan trascendente.
El hablar de una "Nueva" Constitución, permite apreciar la vocación del Ejecutivo por desmarcarse de la carta hoy vigente, firmada el año 2005 por el Presidente Lagos. luego de una importante reforma, y nos plantea otra interrogante, frente a la iniciativa del gobierno que busca modificar preliminarmente el capítulo XV de nuestra carta fundamental (que establece actualmente los mecanismos de reforma), para luego, fijado un nuevo procedimiento, efectuar las "grandes reformas" por la vía institucional; aspecto que valoro, pero que no se condice con condición de una constitución "nueva", encontrándonos más bien, ante una nueva reforma, fruto del poder constituyente derivado. Como indiqué anteriormente nos encontramos ante el comienzo de un largo proceso que generará mucho debate político y académico, que esperemos, por su magnitud, cuente con garantías de imparcialidad por el gobierno de turno, de forma tal, de permitir un debate de ideas abierto y no direccionado, especialmente en las etapas de discusión ciudadana que se avecinan.
Alejandro Paredes Zieballe AbogadoMag. en Derecho Público.
Lógica autoritaria
Por la derecha y la izquierda, Chile está entrando en una lógica autoritaria, donde el gobierno omnipotente se instala suavemente.
Las últimas leyes promulgadas (como el control de identidad y la ley mordaza -mientras la prescripción por delitos electorales baja a dos años) son reflejo de una noción prepotente del poder político estatal, donde el individuo, debe ser subyugado a los criterios del Estado, los gobernantes de turno, sus grupos de interés asociados o las mayorías circunstanciales que los apoyan.
Esto que puede sonar alarmista hoy, es el inicio del declive de una serie de libertades civiles y políticas.
Jorge Gómez Arismend jorgegomezarismendi@gmail.com