El primer cómputo oficial de la segunda vuelta presidencial celebrada ayer en Perú mostraba una estrecha diferencia entre los candidatos Pedro Pablo Kuczynski, del movimiento centroderechista Peruanos por el Kambio (PPK), y Keiko Fujimori, del partido derechista Fuerza Popular. Ambos aspiraban a suceder al Presidente Ollanta Humala en el periodo 2016-2021.
Con el 36,1% de las mesas escrutadas, Kuczynski, de 77 años, obtenía un 50,58% de los sufragios, frente al 49,42% que lograba Fujimori, de 41 años, según informó la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE) a las 21 horas local (22 horas de Chile).
Horas antes, un sondeo de Ipsos Perú daba a Kuczynski una leve ventaja sobre su rival, de 50,5% de los votos versus un 49,5% que obtenía Fujimori. Mientras, la empresa GfK le entregaba el 50,8% de las preferencias al ex ministro de Economía, contra el 49,2% de la hija del encarcelado ex Presidente Alberto Fujimori.
Después de los conteos, Kuczynski salió al balcón de su casa ubicada en un distrito residencial de Lima, alzando la mano derecha en señal de triunfo junto a su esposa y sus principales colaboradores. "Tenemos que ser vigilantes para que no nos roben los votos en la mesa", expresó.
Un rato antes, Fujimori había saludado desde la terraza de un hotel a sus partidarios. "Vamos a esperar con prudencia porque toda la noche llegarán los votos de las regiones, del extranjero y el voto rural del Perú profundo", dijo. Aunque la contienda era muy cerrada, seguidores de los dos candidatos festejaban.
"dictadura no"
Cerca de las 11 de la mañana, Keiko Fujimori llegó a sufragar a una escuela de un barrio de clase alta de la capital peruana, rodeada de un equipo de guardaespaldas que le abrió paso en medio de casi un centenar de personas que la alentaron y se tomaron fotografías con ella.
Poco después, pasadas las 11 de la mañana, Kuczynski llegó a votar a un colegio de un barrio acomodado de Lima. Un centenar de personas lo recibió con gritos de "dictadura no, democracia sí". PPK, protegido por un equipo de seguridad, dijo en medio de la gente, "que viva la democracia".
Casi una hora antes sufragó el Presidente Humala. En la oportunidad destacó que el próximo Gobierno será la cuarta gestión democrática de forma consecutiva en la historia de Perú que no es interrumpida por un golpe militar.
Mientras la apuesta electoral de Kuczynski es por un liberalismo económico de la más estricta ortodoxia, Fujimori ha intentado desmarcarse de la figura de su padre, condenado por delitos de lesa humanidad, y su discurso ha sido "no" a golpes de Estado, a persecución, a encadenamiento de la prensa o a corrupción. Pero sí a aquello que su padre hizo bien: el control económico con un modelo liberal y la mano dura contra los que infringen la ley.
Cerca de 23 millones estaban convocados a votar en 77.307 mesas de sufragio. Debido a lo reñido de la contienda, el voto en el extranjero podía resultar clave. Los peruanos también elegían al Vicepresidente del país. Por el partido de PPK competían el ex gobernador Martín Vizcarra y la ex ministra de Economía Mercedes Aráoz. El partido fujimorista solo llevaba al ex ministro de Agricultura Jose Chlimper.
50,5% de los votos
daba la firma Ipsos a Kuczynski, frente a un 49,5% de Keiko Fujimori. 50,8%
de las preferencias entregaba la encuestadora GfK a PPK y un 49,2% a la hija de Alberto Fujimori.
