El mal de parkinson y las bondades de la kinesiterapia
TEMBLORES. Si bien es una enfermedad que no tiene cura, los médicos recomiendan el trabajo físico como tratamiento paralelo a los fármacos.
La enfermedad de Parkinson es uno de los trastornos del movimientos. Causa un proceso degenerativo del sistema nervioso central y es un mal crónico cuyos síntomas empeoran con el paso de los años.
A medida que las células nerviosas cerebrales se deterioran o mueren, se pueden empezar a notar problemas con el movimiento como temblores y rigidez en las extremidades o en el tronco, además de la pérdida del equilibrio.
El coordinador de Kinesiología del Centro de Salud de la Universidad San Sebastián, Valdivia, Cristian Flores, sostiene que es importante tratar esta enfermedad, especialmente cuando afecta mayoritariamente a personas de la tercera edad. "Aproximadamente 1% a 2% de la población mayor de 65 años sufre esta enfermedad, cifra que se eleva a 3% y 5% en mayores de 85 años. La prevalencia en países europeos es entre 100 y 200 por cada 100 mil habitantes. En Chile, no existen datos precisos al respecto, pero basados en datos internacionales se puede estimar que existen cerca de 40 mil pacientes que tienen Parkinson", explica.
El kinesiólogo sostiene que "actualmente no existe una cura para la enfermedad y el tratamiento de elección es el uso de fármacos, siendo el más común la Levodopa, que tiene como objetivo principal el alivio de los síntomas, logrando retrasar el avance natural de la enfermedad, mejorando significativamente la calidad de vida del paciente".
Por otra parte, existe la kinesiterapia que es uno de los tratamientos no farmacológicos, cuyo objetivo es mejorar y mantener la calidad de vida de quienes la padecen, contribuyendo a aumentar la movilidad, mejorar el equilibro, coordinación y ayudando a mantener durante más tiempo la autonomía del paciente, permitiendo una educación de la familia, cuidadores y comunidad en general, haciendo que éste tenga un rol activo en su proceso de rehabilitación.
Flores, afirma que la USS posee un proyecto de Vinculación con el Medio con la Agrupación de Parkinson Valdivia, donde participan las carreras de Nutrición, Fonoaudiología y Kinesiología.
Beneficios
En el Centro de Salud de la USS se atienden a pacientes de Parkinson y se les realiza una kinesiterapia, que si bien no detiene la progresión de la enfermedad posee una serie de beneficios para los pacientes.
"Esto permite disminuir la incapacidad motora, mantener las funciones cardiorrespiratorias, las destrezas propioceptivas, desarrollar estrategias para una mejor movilización, todo lo cual posibilita mantener la funcionalidad lo mejor posible. Lo que se busca es que los adultos mayores pueden ser capaces de realizar sus actividades básicas de la vida diaria y actividades instrumentales. Además de retardar la dependencia y el deterioro psicorgánico propio de estos pacientes. Este apoyo se traduce en un importante ahorro de recursos y mejoramiento de su calidad de vida", afirma. Y agrega: "los objetivos del tratamiento a cargo del kinesiólogo no deben focalizarse sólo en la disminución de síntomas característicos como el temblor, rigidez y bradicinesia (movimientos lentos), sino que se trabaja en el acondicionamiento físico general para que el paciente mantenga una vida activa con actividades ajustadas a las posibilidades, necesidades y contexto en el que se desenvuelven".
"Actualmente no existe una cura para la enfermedad y el tratamiento de elección, es el uso de fármacos".
Cristian Flores, Coordinador de Kinesiología del Centro de Salud USS
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