¿Un nuevo golazo..?
Me cuesta creer que la construcción del estadio regional, tan esperado por todos, no esté priorizado nuevamente por este Gobierno. Cada año es lo mismo: reuniones, anuncios, un paracetamol para niño, y nada.
Hace algunos meses se presentaron, por parte de una consultora de Santiago y autoridades regionales, las ideas de diseño para el flamante nuevo estadio, con fecha de entrega septiembre y asegurando que si todo sale bien podría estar la construcción en el presupuesto 2017. Hoy como resultado de reunión gestionada por la senadora Von Baer y cores Hölk y Sabat, la ministra del Deporte mira al cielo y dice que no es prioridad hasta no se sabe cuando.
Esta, la misma autoridad que dejó a Los Rios sin estadio de manera arbitraria durante su primer periodo, hoy vuelve a jugar con la ilusión de miles de deportistas profesionales y amateur, que exigen igualdad regional y "equidad", palabras más que manoseada por algunos.
Hasta aquí solo nos queda asumir este nuevo "golazo" que nos metieron a todos. ¡¡Hasta cuando!!
Peter Zippel Concejal
Más allá del Sename
Las 185 muertes en el Servicio Nacional de Menores desde 2005 dejan a la vista una cruda realidad en Chile: el abandono de los niños. Y nuestra reacción no puede quedarse en la atención frente a la crisis, sino que debemos calar más profundo y responder por qué hay tantos niños en dicha situación y dónde estarían mejor.
La respuesta, tan antigua como nueva, es la familia. Los niños del Sename suelen tener historias de abandono y de violencia, en definitiva, de desamor. La familia que acoge a la persona, por tan sólo ser persona, es el primer espacio de socialización, donde se gestan las habilidades relacionales que nos ayudan a convivir en sociedad (Berger y Luckman, 1991). Si esto no existe, el niño crece triste y solo, campo de cultivo fácil para la rebeldía y la frustración, que sólo engendra más violencia.
Lo complejo es cómo ayudar a los niños y jóvenes en situaciones complejas a salir adelante, en conjunto con sus familias, y para eso las políticas públicas deben cambiar el foco de intervención. Considerar al individuo afectado como el único beneficiario es parcial. Debe ser la familia el objeto principal de las políticas públicas, donde se fortalezcan sus vínculos, se amplíen sus horizontes, pues permitir su desarrollo es el medio real para evitar el desamparo y que tantos niños terminen en manos de una institución que no está cumpliendo su promesa.
Claudia Tarud Universidad de los Andes
Puente Los Pelúes
Se acercan las Fiestas Patrias y el tema de los puentes en nuestra ciudad ya parece cueca.
Además de los problemas del Cau Cau, hoy nos encontramos con otro: se anuncia que el diseño del puente Los Pelúes será cambiado, porque el que cuesta $ 39 mil millones es muy caro para Valdivia, aunque en Santiago no se fijan en gastos para hacer nuevos túneles para mejorar el tránsito.
Al parecer la idea es diseñar un puente similar al Santa Elvira y obviamente con un costo inferior. Pero yo creo que nuestra ciudad merece un puente con características especiales, hermoso y ubicado en el lugar que lo valida el diseño actual, por lo tanto es prudente consultar al gobierno qué debemos hacer para poder ser dignos merecedores de inversiones por la cantidad señalada o superiores.
Por otra parte en la decisión de cambiar el diseño y tal como la manifiesta el señor Pedro Ríos Weldt, en su carta al Diario Austral de fecha 06.08.2016, algo tiene que decir el municipio, al cual no se le ha consultado y sí que hay que hacerlo, ya que cuando se tomó la decisión de ejecutar este puente se conformó una comisión multisectorial, con la municipalidad incluida. Por lo anterior, esto de cambiar el diseño y no comunicarlo, es una decisión unilateral .
Los valdivianos sabemos, como también lo saben y de sobre manera las autoridades, que nuestro heroico Pedro de Valdivia sufre del cansancio de los años. Es de esperar que no llegue el momento que tengamos que pasar a la isla Teja y llegar a la costa en bote, como antaño.
Francisco Eguiluz Figueroa Concejal
Problemas en el centro
Estamos muy preocupados por un grupo de personas que vive en la calle y pululan por la zona central de Valdivia, bebiendo en la vía pública, haciendo sus necesidades físicas en las plazas, molestando a los peatones y peleando entre ellos.
Estas personas no tienen casa, duermen en la Costanera o en la entrada del Servicio de Impuestos Internos, a la intemperie. Nos preocupa verlos en esa indigencia tan extrema y creemos que debiera abrirse oportunidades para que cambien su situación. Pero también nos inquieta la imagen que damos como ciudad con esta verdadera tribu urbana, que se está convirtiendo en un peligro para quienes vivimos, trabajamos, o tenemos negocios en la zona céntrica. En otras ciudades turísticas como Pucón, Villarrica, Puerto Varas, este tipo de situaciones no se dan, porque cuidan a sus visitantes y su capital más valioso: la tranquilidad y seguridad de las personas.
Vecinos Centro de Valdivia