Juan Vargas Oñate
Once años se cumplieron ayer de la desaparición del joven universitario Carlos Hugo Millán Cárdenas, quien fue visto por última vez el 1 de octubre de 2005, después de acudir a una fiesta de su carrera de Turismo de la Uach.
Tenía 21 años de edad y nadie sabe hasta hoy qué sucedió con él.
La investigación desplegada para hallarlo, está declara desde el 8 de julio del año pasado bajo el rótulo de "no perseverar" por el Ministerio Público. Es decir, cerrada aunque dispuesta para ser reabierta en caso de que surgiera algún antecedentes o testimonio que aportaran luz al misterio.
Llanto y agotamiento
Sus padres, Hugo y Cristina, que lo buscaron y lloraron en Valdivia, regresaron a su ciudad de origen Ancud, agotados física y sicológicamente de la búsqueda y de la angustia, de ver cómo pasaban , primero los días, luego los meses y después los años, sin que nadie pudiera explicarles qué le sucedió a su hijo.
En un informe sobre este emblemático caso, la Fiscalía aseguró que junto a las "mil diligencias", se habían efectuado 256 operativos de búsqueda con la participación de Carabineros y la PDI, habiéndose además rastreado todos los ríos de la ciudad en botes zodiac y también localidades aledañas, con el apoyo de perros entrenados en búsqueda de personas.
La acción policial se extendió a ciudades como Puerto Monta, Temuco y Santiago, entre otras, donde testigos indicaban haberlo visto con vida. Sin embargo, nunca lo ubicaron.
8 tomos y 2 mil hojas
La carpeta de la investigación realizada acumuló 8 tomos con alrededor de dos mil hojas, con los resultados de las pistas seguidas y que incluso surgían con el tiempo.
El Ministerio Público aseguró al declarar el caso como "no perseverar", que "se agotaron todas las hipótesis de investigación".
Otros casos sin resolver
En la región de Los Ríos también hay otros casos de personas desaparecidas que aún no son resueltos. Entre los más emblemáticos se cuentan el del estudiante del Liceo Industrial de La Unión Yordan Fernández Ruiz, visto por última vez el 22 de diciembre de 1997; y el caso de Reinaldo Segundo Gajardo Rain, pescador de Carboneros, que desapreció el 22 de abril de 2008.