El fiscal (s) de Panguipulli, Pablo Silva Oyarzún, debió solicitar ayer en el Juzgado de Garantía, la ampliación de la detención del conductor Oscar Antonio Neculfilo Hueitra, de 33 años, quien durante el fin de semana atropelló y dio muerte a dos personas en la ruta T-253 que une a Lican Ray con Panguipulli.

La solicitud del fiscal se debe a que esperará el informe de la alcoholemia, para determinar si el chofer conducía ese día ebrio o bajo la influencia del alcohol.

La medida de ampliar su detención tendrá vigencia hasta mañana jueves. Cuando se pueda contar con el documento y su resultado, el fiscal podrá imputar al detenido el grado de su delito.

El fiscal Silva declaró ayer al término de la audiencia de control de detención en el Juzgado de Garantía de Panguipulli, que la detención de Neculfilo, por parte de Carabineros, se declaró legal, pero que, sin embargo, "solicitamos ampliarla debido a que no hemos recibido el informe de la alcoholemia practicada al imputado, que nos permitirá definir si lo formalizaremos por manejo en estado de ebriedad, o bajo la influencia del alcohol causando dos muertes o bien por cuasidelito de homicidio", precisó. El juez de Garantía accedió a la solicitud del fiscal (s) del Ministerio Público y, por lo tanto, la Fiscalía formalizará mañana jueves la investigación, en contra del conductor, quien continuará detenido.

LAS VíCTIMAS

Como se informó, las dos víctimas, Francisco Huaiquifilo Hueitra y Gonzalo Millañanco Pailacura, fallecieron en puntos diferentes de la ruta, aproximadamente a un kilómetro de distancia, producto de los violentos impactos con el vehículo que fueron atropellados y que conducía Oscar Neculfilo.

Hasta ahora todo indica que éste, al atropellar a la primera víctima, huyó del lugar, sin prestarle auxilio, y que en su desesperado escape, arrolló a la segunda persona, a la que también dejó abandonada a su suerte en la ruta, sin tampoco dar aviso a la autoridad.

Juan Vargas Oñate

Cinco viviendas de un antiguo colectivo ubicado en calle Mackenna, frente a la parroquia Preciosa Sangre, en el sector de la Corvi, ardieron ayer rápidamente alrededor de las 19.45 horas, obligando a seis compañías de Bomberos a responder a la alarma declarada.

El comandante de Bomberos, Ricardo Valverde, señaló que 12 personas resultaron damnificadas y que el origen del incendio fue un cigarrillo, al parecer mal apagado, dentro de la vivienda número 466.

El fuego comprometió material que hizo que las llamas se propagaran hacia la techumbre y los costados, afectando y causando daños de consideración en el resto de las otras cuatro casas del bloque, cuyos moradores alcanzaron a sacar solo algunas pertenencias y escaparon para no resultar heridos.

Un detenido

Mientras los bomberos de las seis compañías hacían esfuerzos por controlar el fuego y evitar su propagación hacia una casa esquina por un lado y por el otro hacia una frutería, Carabineros detuvo a un hombre y lo llevó hasta la tenencia Mogollones.

Vecinos del lugar comentaron que habitualmente esta persona -cuya identidad no fue posible conocer- acostumbraba beber y fumar, por lo cual lo responsabilizaron de causar el incendio. En Carabineros indicaron que se le realizó un control de identidad y los vecinos consultados afirmaron no saber su nombre.

El comandante de Bomberos confirmó que el fuego comenzó en su casa y por un cigarrillo encendido.

Una de las casas afectadas y con daños de consideración fue la número 486, que habitaban el párroco de la iglesia Preciosa Sangre, Luis Briones, y un diácono.

Otra de las viviendas eran habitada por Graciela del Carmen Baeza (No. 474), quien lo hacía con otra persona.

Una anciana

En otra de las casas destruidas por el fuego, la número 458, vivía Carmela Otárola Soto -una anciana de 92 años- quien quedó albergada en casa de vecinos de la comunidad de la parroquia.

Otros vecinos señalaron que la anciana perdió la totalidad de sus pertenencias.

En la casa Nº 450 vivía Jacqueline Macías, junto a otras cuatro personas, quienes también resultaron con su vivienda afectada por el fuego, especialmente en la techumbre.

Todos los damnificados fueron llevados a casas de familiares.

Acción de riesgo

Dos vecinos del colectivo subieron ayer desesperadamente hasta la techumbre, para comenzar a remover las latas de zinc y evitar la propagación del fuego.

El comandante de Bomberos, Ricardo Valverde, criticó dicha acción, calificándola de "temeraria y riesgosa", ya que los voluntarios de las compañías Primera, Tercera, Quinta, Sexta, Séptima y Novena -que acudieron al lugar- lograron controlar el fuego y evitar consecuencias mayores.

Una voluntaria identificada como Paulina Cárdenas resultó con heridas de carácter leve, luego de sufrir una caída al interior de una de las viviendas siniestradas.