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ENTREVISTA. roger chartier, historiador francés.

"El mundo digital es un mundo de lectores; nunca antes se había leído tanto"

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María Alejandra Pino

El libro impreso resiste en la era digital; sin embargo, no existe una certidumbre que permita afirmar que nunca desaparecerá. Así lo plantea Roger Chartier, historiador francés, destacado como uno de los principales representantes de la última generación de la escuela de los Annales. El profesor del Collège de France y Doctor Honoris Causa de la Universidad de Chile, ha centrado sus estudios en la historia cultural, principalmente, en la articulación de lo escrito, el libro como objeto impreso y las prácticas de lectura. En su cuarta visita a Chile, Chartier participa en las actividades de celebración del 60° aniversario de la Facultad de Filosofía y Humanidades de la Universidad Austral de Chile.

-¿En la era digital, en que posición o lugar está el libro impreso, éste ha sido desplazado?

-Estamos en una era digital, pero usted va a publicar en un periódico impreso. Estamos en un momento de tensión. En el mercado del libro, en todos los países salvo Estados Unidos, el libro electrónico representa menos del tres por ciento de las ventas, entonces se podría decir que la cultura impresa, y particularmente el libro, resiste. Hay una tensión, incerteza e incertidumbre entre lo que aparentemente es una fuerte resistencia del libro y las crisis de las grandes instituciones de la cultura del libro y no sé lo que define el futuro, pero claramente estamos frente a un diagnóstico ambivalente.

-Usted plantea que existe una incertidumbre, ¿para proyectar que el libro impreso en un futuro cercano o distante vaya a desaparecer?

-No podemos decir como lo hacen algunos, como Umberto Eco, que el libro nunca desaparecerá. No hay una certidumbre sobre esto. Debemos pensar en otra dimensión, que es que el mundo digital no es solamente la edición digital, sino que es el mundo cotidiano, en el cual todas las relaciones se han digitalizado: las redes sociales, las relaciones con las instituciones y las administraciones, los impuestos, el mercado. El mundo digital no es tan nuevo, desde los años 90 se podía hablar de formas de publicación digital, pero la digitalización de las relaciones sociales evidentemente es más reciente y tiene como consecuencia la redefinición de los conceptos de las experiencias, amistad, concepto de lo privado y público. Todo esto define un nuevo mundo en el cual nuestro libro se encuentra con desafíos que no eran los de hace 20 años.

-¿Cuál es el impacto de ese nuevo mundo para el libro impreso?

-Como lo he dicho en varias conferencias, los historiadores son muy malos profetas y no voy a profetizar, pero debemos considerar que esta tensión entre datos contradictorios de la resistencia del libro impreso hoy en día no significa que necesariamente sobrevivirá a todos los tiempos, particularmente en un mundo digital más y más presente y conquistador, que se apodera de todas las prácticas.

-En ese contexto, ¿cuáles son los desafíos para las editoriales y escritores para impulsar esa resistencia?

-La edición digital es muy marginal en el mercado del libro y para los editores inventar o pensar en una forma digital está escasamente separada de una forma impresa. Entonces, lo que se debe hacer es imponer en mundo digital los criterios de la edición tradicional: propiedad literaria, definición de la obra como tal; el mundo digital permitiría una libertad en relación con esos elementos, es decir, textos maleables, sin autor. Para los escritores, hay pocos que han totalmente decidido publicar electrónicamente, inclusive si componen los libros de manera digital, si tienen un blog o una página web, la publicación generalmente es la forma impresa porque en este caso se puede proteger la propiedad intelectual.

-En el caso de los lectores, ¿también hay una redefinición en la relación con los libros, cuáles son los desafíos?

-Aquí es más complicado, porque los lectores según su generación pueden leer materiales impresos e utilizar el mundo digital, en tanto los más jóvenes de los lectores pueden, al revés, pasar todo el tiempo frente a las pantallas de todo tipo y eventualmente encontrar un libro impreso. Si la práctica digital domina todos los momentos de la vida por qué no también incorporar en esta práctica lo que llamamos el libro, de una forma nueva, que sería la forma digital, sea porque el libro respeta digitalmente los criterios que mencioné anteriormente o se libera de esto para inventar una nueva cultura escrita.

-¿Es un mito que las personas no leen o efectivamente está ocurriendo ese fenómeno?

-Sí es un mito. En relación con la lectura impresa, en todos los países lo que se ha mostrado es que siempre hay un progreso del porcentaje de gente que ha leído un libro, recientemente una encuesta realizada en Brasil mostraba un progreso en los últimos cinco años de un seis por ciento. Y se podría decir más, el mundo digital es un mundo de lectores, para todo se debe leer, inclusive en los juegos electrónicos; de esta manera, nunca se ha leído tanto y tal vez nunca se ha escrito tanto, porque con las redes sociales, twitter, sms, la gente escribe más que antes, incluso los más jóvenes; el problema es la naturaleza de este tipo de lectura y escritura, que es diferente de los criterios clásicos. Es un mito pensar que hay una reducción de la lectura, es un mito de la gente que piensa que la lectura debe ser de Pablo Neruda o de Shakespeare.

"En todos los países lo que se ha mostrado es que siempre hay un progreso del porcentaje de gente que ha leído un libro". "Hay una tensión, incerteza e incertidumbre entre lo que aparentemente es una fuerte resistencia del libro y las crisis de las grandes instituciones de la cultura del libro". "El mundo digital no es solamente la edición digital, sino que es el mundo cotidiano, en el cual todas las relaciones se han digitalizado"."

Aniversario de la Facultad de Filosofía

Hoy finalizan las actividades con que la Facultad de Filosofía y Humanidades de la Universidad Austral de Chile celebra sus 60 años de fundación. Durante esta jornada el programa incluye un foro pluriestamental denominado "Historia y memoria de la Facultad de Filosofía y Humanidades". Éste se realizará a las 11:30 horas en el auditorio del edificio Eleazar Huerta. En tanto, entre las 14 y las 18 horas se desarrollará una cicletada disfrazada, que partirá desde el costado del mismo edificio y finalizará en la plaza Simón Bolívar . La ruta será de una longitud de 12,3 kilómetros y se estima que durará dos horas, aproximadamente.

actividades 3

participó Roger Chartier, ofreció dos conferencias y dictó una clase. 4

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