Los profesionales que integran la red del programa de Protección de Derechos del Sename se reunieron en la sede del Sindicato de Trabajadores de la Universidad Austral de Chile para participar del taller de análisis sobre la incidencia de la perspectiva de género en los procesos educativos y formativos de los niños y adolescentes.

La jornada comenzó con una exposición de los factores culturales que facilitan el surgimiento de algunos estereotipos de diferenciación entre hombres y mujeres, con una revisión del impacto de los medios de comunicación en esta temática. Luego, se desarrolló un taller práctico, donde se orientó a los profesionales para que puedan confeccionar material lúdico en actividades de reflexión con los adolescentes.

La directora regional de Sename, Ríos, Ximena Ferrada, valoró esta iniciativa e indicó que "existe un compromiso con la equidad de género, siendo una prioridad, seguir avanzando en una mayor generación de oportunidades en todos los ámbitos. Se trata de articular voluntades y generar una cultura de respeto hacia los temas de género, con la finalidad de que nuestros niños y adolescentes puedan tener una perspectiva diferente sobre los roles y estereotipos".

Por su parte, el director regional de Prodemu, Felipe Quezada, señaló que "la meta es avanzar hacia mayores condiciones de igualdad y este trabajo realizado en conjunto con Sename, responde a ese desafío. Hoy, los temas de género se deben interiorizar en la cultura de las personas".

Los estudios lo aseguran. Cuando en una organización los trabajadores son felices, la excelencia aumenta en un 40 por ciento, la productividad en un 42 por ciento, la calidad del servicio en un 30 por ciento y se reduce la accidentabilidad en un 50 por ciento. Para hablar sobre este tema, el actual director del departamento de Psicología Organizacional de la Escuela de Psicología de la Universidad Adolfo Ibáñez, Ignacio Fernández, quien además es autor del libro "Cómo construir felicidad en el trabajo", participó en el seminario "Felicidad Organizacional", desarrollado por la Universidad Santo Tomás sede Valdivia.

-¿Es posible ser feliz en el trabajo?

-Absolutamente. La felicidad en el trabajo, como en la vida, es una decisión personal. Depende de cómo veas la vida y las personas que abordan la vida desde construir bienestar son mejores trabajadores. Mucha gente cree que solo se da si la organización en la que se trabaja es muy buena. No necesariamente es así y los estudios lo demuestran. Hay organizaciones muy buenas en las que la gente es infeliz.

-¿Qué características tiene una buena organización?

-Algo que separa aguas son las organizaciones extractivas y las inclusivas. La primera entiende a la persona como un recurso al que le saca lo que tiene desconsiderando salud y estado mental. Es la predominante en Chile. Hacen ganar plata, pero destruyen el planeta, las comunidades, las relaciones sociales, por lo tanto no son sustentables. El segundo tipo de organización deriva de un sistema valórico en el que se trata a las personas como adultos responsables, seres integrales que deben estar en un equipo. Aparecen temas como la confianza y el sentido compartido para lograr las metas. Ellas construyen de manera sustentable, porque el trabajo se convierte en una fuente de desarrollo existencial. A diferencia de la extractiva, donde el trabajo es un padecimiento.

-¿La empresa debe hacerse responsable de la felicidad de los trabajadores?

-Bajo ningún punto de vista, porque la felicidad es personal, pero debe facilitar las condiciones para que la gente despliegue su bienestar y salud, una red de apoyo para que solucione los problemas. Se le acompaña para que la persona resuelva. A una organización extractiva no le importa esto, por lo que no ofrece condiciones. Una organización inclusiva las ofrece, tanto por razones éticas como de negocios.

-¿De qué depende que una organización sea favorable para el desarrollo?

-De la creencia de los dueños, en primer lugar, y de los jefes en segundo lugar, porque son ellos quienes habilitan o inhabilitan los espacios en los trabajos. Son quienes van a abrir o cerrar posibilidades. Hay jefes a los que no les importa nada, que consideran que la organización solo es para ganar plata. Solo les importa el qué, sin importar el cómo. Pero hay un grupo de ejecutivos y gerentes que entienden que el cómo es fundamental.

-¿Existen rubros en los que es más complejo encontrar la felicidad?

-Sí. En aquellos en los que se trata a la gente como mano de obra. En la construcción, en las empresas industriales en general es más complejo porque a la gente se la trata como recurso. Es más fácil en los servicios, porque el negocio depende de la gente. Si tú no tratas bien a quienes trabajan contigo, es difícil que ellos traten bien a los clientes.