Ampliación de Simpson
Con esta arteria ganan no solamente los vecinos, inmediatos favorecidos, porque hay otros alcances en juego. Serán estudiantes y trabajadores los principalmente favorecidos.
Diversos alcances se desprenden de ampliación de la avenida Simpson, que en un plazo de aproximadamente un año y medio debe quedar concluida, para unir el populoso sector del barrio Guacamayo con importantes centros de servicios para la población, partiendo por el acceso al Hospital Base de Valdivia.
Aunque no se trata de una obra monumental, de esas que merecen la presencia de las más altas autoridades en su ceremonia inaugural, representa la unión del cada vez más trascendente sector sur de la capital de Los Ríos, que ya reúne a unos 25 mil habitantes, con otros puntos que se caracterizan por ser sede de entidades encargadas de satisfacer muchas de las necesidades de gente que hasta ahora encuentra anacrónicas dificultades para acceder a ellas.
Además, la puesta en marcha de la nueva arteria permitirá el desahogo de otras avenidas que deben soportar el paso de la cada día más numerosa cantidad de vehículos motorizados. Es el caso de Pedro Montt, Francia y General Lagos, especialmente.
La facilitación de los desplazamientos por el área descrita cumple también con una tarea fundamental para una considerable cantidad de valdivianos que viven en medio de una alta vulnerabilidad social, ya que serán estudiantes y trabajadores los principalmente favorecidos.
El resto de la ciudadanía también tendrá motivos para considerarse beneficiado, ya que no es misterio que al área urbana le hacen falta vías de categoría para desplazamientos más rápidos.
En vista de los problemas que presenta el tejido estructural de Valdivia, con ausencia de puentes en puntos clave, que componen un tema largamente analizado y discutido, el contar con unas cuantas avenidas que agilicen los viajes en aquellos sectores que no exijan el cruce de ríos, resulta muy valioso.
Si a ello se suma que usar una calle nueva implica necesariamente no tener que enfrentar calzadas que parecen salidas de recientes bombardeos, es otra razón para regocijarse.