Secciones

La variada oferta de conciertos que se abre para la temporada estival 2017

MÚSICA. Artistas como Charles Aznavour, Raphael, Jesse&Joy y Justin Bieber se presentarán en Santiago.
E-mail Compartir

Amelia Carvallo

Un amplio abanico de artistas musicales se tomará la cartelera en el verano: desde los duetos pop de Río Roma y Jesse&Joy, la abultada trayectoria de Charles Aznavour, Raphael acompañado de una orquesta sinfónica, y el ultra popular canadiense Justin Bieber, quien trae su "Purpose World Tour".

Dúos de hermanos

Los mexicanos de Jesse&Joy confirmaron un show en el Sun Monticello para el 11 de febrero, con entradas que van desde los $ 8 mil, bajo el sistema Ticketek. Además, Jesse&Joy estará el día anterior en el Festival de Talca que transmitirá TVN.

Los hermanos actualmente están promocionando "Un besito más", su disco de estudio más reciente y cuya canción que da nombre al trabajo está inspirada en la muerte de Eduardo Huerta, padre de los jóvenes músicos.

El álbum ganó en los últimos Latin Grammy Awards las categorías de Mejor Álbum Vocal de Pop y de Canción del Año, con "Ecos de amor".

Por su parte, y como antesala a su participación en el próximo Festival de Viña del Mar, el dúo mexicano Río Roma tiene agendado para este 26 de febrero un concierto en el Movistar Arena, y las entradas ya están a la venta a través de Puntoticket, con precios que van desde los $ 15 mil.

Desde que este dúo pop saltó a la fama en Chile en 2015 con la canción "Mi persona favorita", que venía en su disco "Otra vida" (2013), el número de sus seguidores en el país creció de forma exponencial.

Este año presentaron su tercer disco de estudio, "Eres la persona correcta en el momento equivocado", con el cual ya se posicionan como favoritos gracias a "Caminar de tu mano".

Trayectorias

Marzo comienza con la visita de Raphael, quien el sábado 4 de marzo presentará "Raphael Sinphónico", en el Movistar Arena, con boletos cuyos precios varían entre $ 100 mil y $ 20 mil.

En esta presentación, el cantante exhibirá su extenso repertorio acompañado de la Orquesta Filarmónica de Chile, con más de sesenta músicos en escena que lo acompañarán en un recorrido por sus más de 55 años de trayectoria.

El más reciente trabajo discográfico de Raphael es "Infinitos bailes", cuyo primer single es la balada romántica "Aunque a veces duela", que ya cuenta con un videoclip que muestra al intérprete de 73 años en una sentida performance.

Chile también es parte de la ruta de "Solo una noche", gira que traerá al eterno Charles Aznavour al escenario del Teatro Caupolicán el 11 de marzo próximo.

La última vez que estuvo Aznavour en Chile fue en 2013, una fría noche de mayo cuando emocionó en el Movistar Arena a los cerca de diez mil asistentes.

El francés de sangre armenia, de actuales 92 años, acaba de incendiar de sensaciones el Palais des Sports en París, donde se despachó lo mejor de su repertorio de 83 años de actividad musical en un show de dos horas. Como hizo el 2015, en el mismo escenario, el compositor de "Venecia sin ti" abrió su show con una canción acorde con los tiempos: "Les emigrants" y, como consignó Le Monde, el intérprete nacido en París en 1924, derrochó el vigor de un veinteañero frente a los cuatro mil espectadores que se congregaron el pasado jueves para escuchar su romántico cancionero.

Justin bieber

Cierra la cartelera musical de este verano, Justin Bieber quien se presentará en el Estadio Nacional el jueves 23 de marzo, un alto más de su gira mundial "Purpose World Tour". Esta es la tercera vez que el canadiense vuelve a encontrarse con su público chileno, la primera fue en 2011, luego vino en 2013, todos shows que se desarrollaron en el mismo recinto deportivo de Ñuñoa.

El joven cantante se presentará con un repertorio basado principalmente en su último disco "Purpose", del cual destacan los singles "Sorry", "Love yourself" y "What do you mean". Con precios de entradas que fluctúan entre los $322.000 y los $41.000, la productora encargada del recital confirmó que los boletos más caros, con la ubicación más cercana al escenario, ya se agotaron.

Carlos Vives regresa en febrero

El intérprete de "La bicicleta", canción a dúo con Shakira que ganó dos Latin Grammy ("Grabación del Año" y "Canción del Año"), Carlos Vives, regresa al país el 10 de febrero, en el Teatro Caupolicán de Santiago, con la gira "La fiesta de todos". "La música latina es la más escuchada en nuestro país. Potenciar los singles en distintas plataformas hace que las canciones se conviertan en éxitos transversales", aseguró la productora T4F+Bizarro.

La Performance del Terror

E-mail Compartir

El fantasma de la tercera guerra mundial está de nuevo. En realidad hace rato que llegó para quedarse. La imagen impresionante del embajador ruso en Turquía asesinado por un policía de civil que vestía impecablemente (que era un yihadista) que se supone lo custodiaba, utilizando una pistola. Todo esto en una galería en que se inauguraba una exposición de fotografías sobre Rusia, desde la mirada turca, resultó ser una performance increíble, a la que se le podría sumar el atentado en Berlín en una feria navideña, cuya arma homicida era un camión. Ya nada es novedoso a este respecto.

Escribir sobre esto es redundante. La novela de la guerra total está en curso. Ver la BBC de Londres nos retrotrae a la época en que la espectacularidad de la razón armada y el intervencionismo (para no hablar de guerras expansionistas) eran noticias marginales y salían como documentos fotográficos en la revista Life de otra época, en que fotógrafos como Robert Capa arriesgaban sus vidas haciendo reportajes fotográficos. Recuerdo haber ojeado unos ejemplares de esa revista, porque mi hermano las coleccionaba y ahí me enteré, vía reportaje fotográfico de un conflicto armado en Chipre, producto de una ancestral disputa por la hegemonía en ese territorio entre Grecia y Turquía. Para mí era una novedad, como lo puede ser ahora enterarse de lo que ocurre en Alepo, la que era la segunda ciudad de Siria, o en Mosul, ciudad de Irak, para los que vivimos a este lado del mundo.

Si ahora Rusia interviene en Siria y entra en disputas con Turquía por temas de influencia en el área, aunque todo se mixtura con guerras civiles y religiosas, y con la influencia de ISIS en la zona. Podemos, entonces, hacer la homología rápida con la antesala de los dos grandes conflictos armados del siglo XX, sobre todo con la primera guerra y el asesinato del archiduque Francisco Fernando del imperio austrohúngaro, que produce una reacción en cadena de conflictos que ya estaban en marcha.

Ahora, en términos de nuestro negocio, oportunistamente, vuelve el género del espionaje, interrumpido por la caída del clásico Muro de Berlín, que siempre se está reconstruyendo. Gracias al fundamentalismo islámico y a la necesidad de reacomodo del capitalismo, se vuelven a construir los enormes dispositivos materiales y simbólicos que separan las culturas, y se repone un modo de producción literario fundamental, tanto para la literatura como para el cine. Ruego disculpar el tono irónico, muchas veces debo hacer lo mismo porque dicha figura literaria es cada día más complicada de sostener en medio de tanta barbarie.

Desde que Teodoro Adorno, filósofo de la escuela de Frankfurt, dijera que después de Auschwitz ya no se podía escribir poesía, porque los síntomas que dejó la cultura de la muerte nazi en la modernidad impedirían los flujos estéticos, entre otras cosas por las marcas imborrables que deja la voluntad de maldad en las culturas, que tienden a naturalizarse. Y quizás, paradojalmente, en momentos como estos que vivimos hoy día, en que vuelven las ganas de holocausto, esa subjetividad, ese canto poético que surge de la intimidad de un acto creativo que recrea la palabra de un pueblo, se justifique mucho más ahora, que la nueva guerra ya está declarada, simplemente para afirmar la cultura de la vida.

Me gustaría escribir, quizás, una novela en ese registro. Nos hemos acostumbrado a los actos dementes; todo el terrorismo de estos últimos años parece estar engarzado en la ficción más absoluta o, al menos, en extremar los límites de la imaginación catastrófica y destructiva, coqueteando con el apocalipsis. Homologando la tesis de Adorno en relación con la poesía y el holocausto, podríamos decir que ya no se puede novelar, ya no sería posible, dadas la imaginación criminal puesta en los proyectos de exterminio. Ninguna narrativa sería viable, no por temas éticos, sino por los niveles de registros de la imaginación perversa. Las Torres Gemelas fueron el comienzo de ese modelo de guerra cultural.

¿Qué es lo que hace tan deplorable a occidente? ¿Es tan brutalmente destructiva nuestra civilización? Hay que buscar en los detalles históricos e intentar recuperar el espíritu del al Andalus, esa situación histórica específica, una civilización en que convivieron las tres culturas: judios, cristianos y musulmanes.

Por Marcelo Mellado

Escritor