Clemente Garrido Cea fue boxeador amateur. Peleó 264 veces y solo perdió 12, dos de ellas por KO. Ahora tiene 74 años, es casado y padre de 5 hijas, y quiere volver al ring, como entrenador de jóvenes y también de mayores, porque dice que el deporte es la base para sentirse siempre bien.
"Yo me dediqué al boxeo cuando Valdivia vivía una época muy pobre; no tuve estudios. Me gustaba sobresalir de alguna forma y busqué un club de boxeo y me dediqué a aprender del deporte en el club de boxeo General Yáñez" recuerda y reconoce que el deporte fue una opción para salir adelante.
Llegó a combatir en varias oportunidades en el emblemático Teatro Caupolicán de Santiago, conoció gran parte del país y también Argentina. "En la región de Los Lagos estuve cuatro años donde gané cuadrangulares, en Osorno; en Puerto Varas me rompieron una oreja; en Rancagua peleé contra Nelson Molina, que era un gran campeón", enumera como anécdotas.
Pero no todo fue tan bueno. Su primer entrenador y coordinador de peleas lo estafó durante cuatro años dándole una parte ínfima de lo que se cobraba por cada combate.
"El amateur no cobra, no le pagan, pero el tipo que me entrenaba a mi cobraba 500 escudos por llevarme a mí, y a mí me daban solo para locomoción, para leche y comer. Todo el resto se lo dejaba él. Yo peleaba casi todos los meses y a veces todas la semanas, porque me gustaba. De la Federación nacional me llamaron y me dijeron usted no pelea más por amateur y va a hacer profesional, ahí dije no, yo me retiro".
¿Cómo fue sus inicios en el boxeo?
-Cuando llegué a mi primer club, al entrenador le gustó mi forma de ser, porque me encontró rápido y ágil, me preguntó si me quería inscribir para ser boxeador. A lo que le dije que sí. Pero llegué tarde al deporte, fue a los 20 años. Antes no practiqué nada porque era campesino. Resulta que salí bien de los entrenamientos y salí campeón ese mismo año al ganar cinco peleas por KO. Las peleas eran buenas. Entrenaba todos los días, para ser un buen deportista hay que entrenar harto y dejar los vicios.
¿Cuál fue su primer título?
- El primer título lo gané en el Regimiento, por 5 triunfos por KO. Este primer título fue de barrio. Yo fui boxeador amateur, liviano ligero de 63 kilos. En ese tiempo había hartos clubes. Luego fui campeón de novicio. El título de veterano el '68.
¿Qué le gustó de ser boxeador?
-El conocer gente me gustó, pero gente con la misma forma de pensar, donde nadie es mejor que otro, todos somos catalogados de la misma forma. Después de haber peleado nos dábamos la mano, nos abrazábamos. El deporte es deporte y es lo más lindo que hay, después de las peleas no había problemas entre nosotros.
¿Recuerda alguno de las dos peleas que perdió por KO?
- Pero claro. En una pelea que tuve, salí sobrado, masticando chicle. Me subo y recibo un golpe seco y caigo. Bueno son detalles. Uno siempre tiene miedo a la bravura del adversario, a como esté entrenado, a cómo golpee. El temor es perder, si no es otro miedo.
¿Sigue entrenando?
- A mi edad no es lo mismo que antes. Pero retomé el trote, se sienten los años.