Valdivia festejó ayer el 465° aniversario de su fundación, realizada por los conquistadores españoles en 1552. Pocos días antes, conmemoró los 197 años de su incorporación a la República de Chile, gracias a la expedición de Lord Cochrane, que también tomó posesión de Corral, en 1820.
Ambos hitos, sin duda, marcan su historia e identidad y merecen ser celebrados en grande, tal como ocurrió esta semana, con actos cívicos, reconocimientos a ciudadanos ilustres y actividades artísticas abiertas a la comunidad.
Pero más allá de los eventos, cada efemérides de este tipo permite hacer balance y revisar cuánto se ha avanzado. Y este año encuentra a Valdivia con varios logros: resultó elegida entre las 10 mejores lugares para vivir en Chile y fue capital americana de la Cultura en 2016; completa una década como capital de la región de Los Ríos; presenta el más alto porcentaje de publicaciones académicas (en relación a su población) del país y cuenta con cuatro universidades acreditadas, entre otros puntos relevantes, que la hacen una ciudad importante en el sur de Chile.
Según cifras del Instituto Nacional de Estadísticas (Ine, 2010) concentra un 40% de la población regional y desde 2011 ha experimentado el mayor repunte local en nuevas viviendas. Esto hace esperar que el próximo Censo muestre una cantidad de habitantes superior a las 160 mil personas.
En cuanto a la actividad económica, reúne a 9 mil de las 19 mil empresas existentes en la región; la mayoría de ellas dedicadas al comercio y los servicios. Tiene una tasa de desocupación de 5.1% (último trimestre 2016) y una fuerza de trabajo de 144 mil personas.
Esos números dan cuenta de un gran potencial de desarrollo, que se proyecta a futuro de manera auspiciosa; sobre todo si se apoya la llegada de mayor inversión privada y se superan algunos problemas que entrampan su crecimiento, como la falta de coordinación entre autoridades.
El mensaje de ayer pronunciado por el alcalde Omar Sabat apuntaba, precisamente, en esa dirección: más unidad y menos críticas. Lograr eso, sin dudas, sería un buen regalo de cumpleaños.