Adiós para dos grandes luchadores
Ramón Quichiyao y Ricardo Westermeyer contribuyeron, desde sus diferentes ámbitos de acción, al desarrollo de Los Ríos. En los ejemplos de vida de personas como ellos, hay enseñanzas poderosas, que las nuevas generaciones deben conocer.
Esta semana Los Ríos perdió a dos figuras que, desde ámbitos diferentes, aportaron para el desarrollo local y fueron reconocidas por el gran compromiso que tenían con el territorio que habitaban.
Por lo mismo, la comunidad brindó emotivos y masivos homenajes de despedida a don Ramón Quichiyao y don Ricardo Westermeyer, ambos fallecidos el sábado pasado y sepultados el lunes, en Futrono y Valdivia, respectivamente.
El primero fue estudiante de la Universidad Austral y el segundo, Padre Fundador de la misma institución; Quichiyao aportó en el mundo de las letras y las artes, con libros y la creación de la Ruta de Neruda; mientras Westermeyer lo hizo con la Agricultura, desde su rol como decano, dirigente gremial e impulsor del Centro Tecnológico de la Leche.
Estuvieron ligados al mundo rural y desde sus perspectivas diversas, contribuyeron a la construcción de la identidad cultural de la región, marcada por el arraigo, la valoración de lo propio y una amalgama de herencias históricas.
Afortunadamente, estos dos grandes hijos de Los Ríos recibieron reconocimientos en vida por sus aportes. No se cometió aquí el error de postergar los homenajes, aunque quizás no fueron todos los merecidos, ni en los momentos más oportunos.
La partida de un buen ser humano siempre es motivo de tristeza. Sin embargo en estos casos -y aparte del duelo público- también cabe el consuelo de ver su recuerdo perdurar en la trascendencia de las obras que impulsaron y frente a las cuales dejan las responsabilidad de cuidado y mantención a quienes les sobreviven.
Ahora que la región de Los Ríos cumple 10 años desde su creación, sería interesante que las figuras de Quichiyao y Westermeyer estuviesen mencionadas especialmente en los actos conmemorativos y que, a futuro, quede testimonio de su legados, junto al de tantos otros, que también lucharon por la construcción de esta zona.
En los ejemplos de vida de esas personas hay enseñanzas poderosas, que las nuevas generaciones deben conocer.