Bicentenario de la Armada
En la Gobernación Marítima de Valdivia, al igual que a lo largo de todo Chile, se desplegó una bandera que simboliza, que nuestra institución está celebrando los 200 años al servicio de la patria.
La historia de nuestra institución en estos casi 200 años de existencia, se remonta a un bergantín inglés, el "Eagle", el cual fue apresado en febrero de 1817, por una partida de chilenos, cambiando su nombre a "Águila", constituyéndose en el primer buque chileno de la naciente Escuadra Nacional.
El 17 de marzo de 1817, el Bergantín "Águila" efectuó su primera comisión al dirigirse a la Isla de Juan Fernández, para traer de regreso al continente a 78 compatriotas que permanecían desterrados allá, entre ellos, el sargento mayor de artillería, don Manuel Blanco Encalada, el que más tarde fuera uno de los forjadores de la Armada de Chile, alcanzando el grado de Vicealmirante.
Es por ese zarpe, considerado como la primera operación naval, que se ha dispuesto iniciar con esta fecha, las actividades del "Bicentenario de la Armada", que se desarrollarán hasta octubre del año 2018.
Son doscientos años de vida para la Armada de Chile, que han impulsado al desarrollo y progreso del país, pero que también han llenado con sangre y tinta, varias páginas gloriosas de nuestra historia, generando héroes como Cochrane, Prat, Condell, Aldea, y tantos otros que anónimamente aportaron con su ejemplo y determinación, convirtiéndonos en herederos de una tradición, con una consigna imborrable y que ha trascendido y se mantendrá en futuras generaciones de marinos, la que está señalada en bronce, en todos nuestros buques, dictando la postura y actitud del marino chileno: "Vencer o Morir".
Cristian de la Fuente Sanhueza Gobernador Marítimo Valdivia
Independiente
El PPD también acordó por unanimidad apoyar al candidato AlejandroGuillier para Presidente.
Alejandro Guillier vendió la pomada de que era independiente. Al comienzo no entendí muy bien su independencia, pero ahora sí: es independiente del PR, del PS, del PPD y del PC. A lo menos, eso es lo que él mismo dijo.
Mauricio Pilleux Dresdner mpilleux@telsur.cl
Ciberataque
A media mañana del viernes 12 de mayo, cundía una alarma general respecto al ataque masivo del virus "Ramsonware", con alcances que inicialmente se pensaron eran de impacto solo europeo y rápidamente pudo comprobarse que tenía un insospechado grado de efecto mundial, con varias decenas de países que verían afectada su infraestructura crítica, en especial de la plataforma de comunicaciones, contaminando una línea de sistema operativo, encriptando sus archivos individuales, para de ahí saltar a copar estructuras de red en escala mayor.
Este no fue un ataque fruto de la improvisación. Una acción de esta envergadura es difícil de implementar, sustentar y lograr éxitos. En este caso en particular, sin lugar a dudas requirió un conocimiento profundo del sistema operativo que afectó, para de ahí identificar sus brechas y vulnerabilidades.
Surge entonces la pregunta de cuán preparados podemos estar en Chile para eventos de esta magnitud. La respuesta parte por la revisión de la Política Nacional de Ciberseguridad (PNCS) 2016-2022, formulada recientemente.
La temática central se fundamenta en que Chile requiere de una capacidad para enfrentar las amenazas cibernéticas, formulando una estrategia nacional al respecto, proveyendo de infraestructura de seguridad al componente fiscal y generando las mejores condiciones para el incremento y progreso futuro del componente privado. Esta política requerirá una actualización constante, dada la continua y dinámica evolución de las amenazas, que son variadas, mutantes y renovadas.
Seamos concretos entonces en la solución de respuesta. Los órganos base de esta estructura son los Computer Security Incident Response Team, (CSIRT), o equipos de respuesta a incidentes de seguridad informática. Hoy en Chile estos centros requieren de recursos humanos y financieros, un marco institucional claro y mecanismos para operar de manera coordinada entre sí.
Como país, debemos tener más que claro que dado el impacto que las tecnologías de la información y computación tienen hoy, no se puede concebir una proyección sustentable de desarrollo si es que la ciberseguridad no está presente como concepto de ser una política de Estado y estar presente en la conciencia ciudadana. La ciberseguridad es entonces, dado los actuales tiempos, indispensable para el crecimiento.
Por ello, Chile como un todo, debe apoyar una política de Estado que se oriente claramente a lograr el uso eficiente de todos los recursos estratégicos, con procedimientos establecidos, actualizados y dinámicos, que permitan en el tiempo el sustento de un entorno con atributos protegidos por la ciberseguridad.
Un ciberespacio protegido debe ser entendido como bien público.
René Leiva V. General de Brigada (R) Consultor en Ciberdefensa