Al Vuelo

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A pesar de la rigurosidad y seriedad del desarrollo del reciente Censo, no faltaron los graciosos sin gracia, que usaron los sellos para hacer bromas. En la Plaza de la República de Valdivia, por ejemplo, Don Camilo Henríquez, luce en su busto dos marcas de "vivienda censada". Obviamente, es una falta de respeto.