Directora Académica

IP-CFT Santo Tomás

El emprendimiento y la innovación obligan a las personas a formar equipos, donde uno de los elementos fundamentales es la construcción del trabajo en redes.

Para algunos autores, la innovación es encontrar soluciones nuevas a problemas que se han manifestado permanentemente, requiriéndose solo la capacidad de generar el pensamiento creativo, sin embargo, las necesidades de respuestas demandan, en gran medida, de miradas y conocimientos multidisciplinarios.

Precisamente, para explicar lo que es esta capacidad innovadora, en Santo Tomás se presentó un excelente ejemplo de proyecto en redes, con equipos multidisciplinario, denominado CyborgBeast; empresa tecnológica que está innovando en la biomecánica de prótesis de mano en 3D para niños y niñas, y que es liderado desde Estados Unidos por el chileno Jorge Zúñiga.

Unos de los atractivos del proyecto es el trabajo de equipo, con la participación ingenieros, diseñadores, terapeutas, psicólogos, entre otros profesionales de distintos campos del conocimiento.

Los alcances de esta iniciativa son enormes, tanto que la empresa ícono del mundo de la tecnología (Microsoft) calificó a esta innovación como uno de los cinco inventos más revolucionarios del año pasado, en el mundo entero.

En este contexto, el soporte tecnológico es fundamental para lograr el éxito en los proyectos multidisciplinarios. Ello, porque para ser eficientes no se requiere de la presencia física de todos los miembros del equipo, ya que hoy es posible trabajar desde cualquier parte con profesionales diseminados por todos los rincones del mundo. Sólo se requiere de un buen equipo humano y una conexión a internet.

Estimular el trabajo colaborativo, el liderazgo y el trabajo en equipo es, hoy en día, uno de los mayores desafíos para las instituciones, lo que, apoyado por el impulso tecnológico, hace que la innovación vaya de la mano de la comunicación y generación de nuevos conocimientos.

Anyulina Arismendi