Artistas locales rinden un homenaje a icónica figura del muralismo valdiviano
REPRODUCCIÓN. Obra popularmente conocida como "El suicida" es de hace ocho años y está de regreso en varios lugares del centro.
En 2009 y como una de las acciones de la Trienal de Chile, que tuvo a Valdivia como una de las siete ciudades para el desarrollo de arte callejero, fue intervenida parte de la muralla del edificio del teatro Cervantes hacia Avenida Alemania. Sobre esa superficie y a casi diez metros de altura, el aquel entonces estudiante de Artes Visuales Uach, Dany Molina, estampó la figura de un hombre cabizbajo con aparente actitud de querer lanzarse al vacío.
La obra fue hecha con la técnica de estencil, que es conocida popularmente como "El suicida" y a ocho años de su estreno está de vuelta en otras murallas. El último mes aparecieron al menos tres réplicas en lugares céntricos de Valdivia, con modificaciones al diseño original. La reinterpretación considera cambios en la altura del personaje, que ahora luce una aureóla, y en la posición de suspies, lo que remite a que ya no está sobre una superficie, sino que flotando. También es un estencil, cuya matriz fue hecha con láminas del plástico utilizadas para radiografías.
El sentido
El colectivo La Noche Valdiviana, es responsable de las nuevas intervenciones. Es un grupo integrado por cuatro estudiantes de arte que decidieron hacer un homenaje a la obra y plantear la reflexión sobre su valor patrimonial tras iniciarse la remodelación del teatro con el riesgo de que fuera destruida. "Por eso decidimos plantearlo como si fuera un fantasma, una figura que acosa en distintos lugares y que es permanente. En cierta forma extendemos el relato original de este suicida que definitivamente se mantiene vivo gracias al reconocimiento de la gente. No obstante, la intervención de la muralla con la remodelación del edificio, cambia también el sentido o la interpretación inicial de la obra, lo que hace que el personaje decida manifestarse en otras partes", explica uno de los miembros del colectivo que firma su trabajo como Chalupa con Lluvia.
el original
Actualmente Dany Molina vive y trabaja en su propio estudio de tatuajes en La Serena. Dice que originalmente su propuesta no fue la representación de un hombre al borde de la muerte, sino más bien la de un sujeto reflexivo, como si fuera la versión moderna de la escultura "El pensador" de Auguste Rodín.
"Fue la gente la que se encargó de desarrollar otra historia, lo que me parece genial porque habla de que se apropiaron de la obra. Y que ahora le hagan un homenaje es mucho más valorable, porque es una señal de que lo quieren mantener vigente y que definitivamente es un icono local", explica. La base para crear "El suicida" fue una fotografía de un sujeto anónimo que el artista registró mientras ambos miraban la refacción del bus en el que viajaban en la ruta Santiago - La Serena.
Molina se tituló en 2008 y su propuesta estética siempre estuvo vinculada a la intervención pública con estencil y a la reubicación de personajes y situaciones.