El debut de Alison Mandel en el Festival de Viña 2018 la tiene sin dormir, según ella misma reconoció: "Desde el domingo que hicimos la conferencia acá- venía bastante aguerrida y me puse nerviosa- estoy un poco mala para dormir".

La humorista ayer se reencontró con la prensa, previo a su presentación de esta noche en la Quinta Vergara. Y a pesar de su confesión admitió, de paso, estar preparada para conquistar al Monstruo, con una rutina que describió como "auténtica" y que tiene "muchas partes que son de mi vida", pues "va más por las relaciones interpersonales con los hombres, con tu mamá, con ir al gimnasio, con tus amigas, como cosas así".

Mandel adelantó que, además, hablará de la "presión social que tenemos las mujeres entre los 30 y 40 años y las que no tenemos guagua todavía, eso de '¿qué pasa?, ¿por qué no tienes guagua, si ya estás casada?'".

Un libreto que ha preparado con cerca de 50 espectáculos en diferentes ciudades del país y que, según dijo, ya dejó de repasar. "Hicimos una gira tan larga", comentó, añadiendo que "ya lo probamos una y otra vez". En ese sentido, contó que no le ha pedido consejos a sus colegas Felipe Avello -quien triunfó en Olmué este año, mismo escenario en el que ella estuvo el 2017-, o Edo Caroe, quien triunfó en Viña.

Ambos son sus amigos y estarán en la Ciudad Jardín apoyándola, pues "confiamos mucho en el trabajo del compañero", según dijo Alison.

Tampoco pidió ayuda a su esposo, Pedro Ruminot, quien enfrentó al Monstruo el 2016: "En temas laborales, no nos metemos mucho en lo que hace el otro. Porque sentimos que cada uno tiene una onda y un estilo muy diferente de comedia y cada uno admira al otro desde su costal".

Incluso admitió, entre risas, que, en un principio, no le contó de su participación en Viña 2018. "Le dije, 'oye, ¿queríamos un verano tranquilo? Quizás no va a ser tanto (risas) porque a fines de febrero tengo algo que hacer'. Él estaba súper feliz", relató.

Lo que sí hará es darle un beso al escenario durante la prueba de sonido, como cábala para que el anfiteatro "la cuide", comentó la humorista.

Mujeres comediantes

Alison Mandel es la segunda mujer en llegar este año en la Quinta, tras el debut de Jenny Cavallo el miércoles, quien sólo se llevó la gaviota de plata. Al respecto, remarcó que su rutina es diferente a la de su compañera en "Minas al poder", ya que Jenny "toca unos temas que, en el fondo, tienen que ver con lo que está viviendo, con la maternidad, algo que es completamente ajeno a lo mío".

Sobre las críticas que recibió el show de Cavallo, opinó que éstas se deben a que es novedoso tener mujeres comediantes en Viña. "Creo que ahora nos estamos educando como sociedad a que existan mujeres (humoristas en el Festival)", aseguró, acotando que este fenómeno ya no será extraño para la gente "de aquí a diez años". "Claro, como se ocupó tanto tiempo el comediante sobre el escenario, habían muchas temáticas que quizás no se habían tocado", finalizó.