Con una ceremonia realizada junto al memorial que recuerda a las víctimas de la catástrofe, este sábado fue conmemorado un nuevo aniversario de la erupción volcánica ocurrida el 2 de marzo de 1964 y que arrasó con casi la totalidad del poblado de Coñaripe.
La actividad fue organizada por la Corporación para el Desarrollo de Coñaripe-Liquiñe con apoyo de la municipalidad de Panguipulli, y en la oportunidad fueron entregados reconocimientos a tres vecinas de la localidad que sobrevivieron a la tragedia.
Se trata de Teresa Gavilán, Sonia Belmar y Noemi Hernández, quienes recibieron de manos del alcalde Rodrigo Valdivia un galvano en agradecimiento por su contribución en la reconstrucción de Coñaripe.
El presidente de la Corporación, Alfonso González, comentó que " actividades como ésta nos llaman a la reflexión y la unidad. Además, estamos orgulloso de entregar estos reconocimientos a estas vecinas que en ese entonces sufrieron la pérdida de familiares, amigos y sus viviendas, quedando prácticamente en la calle".
"La distinción se debe a que participaron en la reconstrucción del pueblo, lo cual nadie había distinguido hasta el día de hoy. Sabemos que son muchos más los que perdieron sus familias y sus hogares, pero no podemos entregar todos los reconocimientos de una sola vez. Por eso el próximo año vamos a realizar una ceremonia más grande", agregó el dirigente.
Sonia Belmar, una de las vecinas distinguidas, comentó que "fue muy emocionante recibir este reconocimiento de parte de la comunidad. Mi padre, Juan Belmar, fue uno de los fundadores de Coñaripe. Es muy poco lo que queda del antiguo Coñaripe, porque la erupción arrasó con todo. Milagrosamente la casa de mi familia se salvó, y hasta los días de hoy vivo en ella".
El alcalde Rodrigo Valdivia sostuvo en tanto que "nos parece un acto muy importante de unidad y trabajo que ha desarrollado la Corporación de Desarrollo Coñaripe - Liquiñe. Además como alcalde y municipalidad nos hemos comprometido de mejorar el espacio en que se recuerdan a las víctimas de esta tragedia".
La tragedia
La madrugada del 2 de marzo de 1964 es sin lugar a dudas la más oscura en la historia de Coñaripe. Ese día el volcán Villarrica desató toda su furia y redujo a escombros casi la totalidad del emergente poblado.
El desastre dejó como saldo 22 personas fallecidas, pero sólo dos de sus cuerpos fueron recuperados, por lo cual 20 de ellos aún están desaparecidos. Según estimaciones de la época, un 80% de la localidad resultó destruida.
Según los relatos de algunos sobrevivientes, el macizo inició su actividad seis meses antes de la erupción. Una de las razones que explican la agresividad del fenómeno natural, radica en que la actividad volcánica provocó el derretimiento de glaciares, agua que poco a poco se acumuló en una hondonada ubicada en parte baja del Villarrica, formándose un pequeño lago.
La noche de la erupción el agua acumulada finalmente se rebalsó, lo cual provocó que 12 millones de toneladas de lava, agua, piedras, árboles, arena y escombros cayeran sobre Coñaripe. El alud habría alcanzado 15 metros de altura.
fue el año de la tragedia. La madrugada del 2 de marzo una erupción volcánica arrasó el 80% del pueblo. 1964
fallecidos dejó la tragedia, de los cuales sólo dos cuerpos fueron recuperados. Hay 20 desaparecidos. 22
kilómetros separan la cumbre del Villarica de la localidad de Coñaripe. El alúd bajó a 50 kilómetros/hora. 17