Escultura sobre la noción del tiempo ganó concurso de tallado en Huilo Huilo
EN PANGUIPULLI. Competencia buscó fortalecer, rescatar y difundir la identidad natural y cultural de la región de Los Ríos
El entorno natural de la Reserva Biológica Huilo Huilo sirvió de escenario para la realización del segundo concurso de esculturas en madera "Tallando el legado histórico del territorio", que tuvo como protagonistas a 34 talladores de todo el país y del norte de Argentina.
Mauricio Pichuante, de Doñigüe, obtuvo el primer lugar con su obra "Tiempo de arrancar y tiempo de plantar", una escultura elaborada con motosierra en un tronco de coigüe de casi tres metros de altura, y que representa el tiempo en la cosmovisión mapuche.
"Quise mostrar la importancia que tiene para mi pueblo pehuenche el paso del tiempo, como una oportunidad de traspasar sabiduría e información a través de las personas, de generación en generación", contó el artista, quien al llegar a la zona recorrió el aserradero patrimonial donde se realizó la actividad, y aprovechó de conversar con muchas personas.
Según detalla el propio artista, la escultura configura a un mapuche pehuenche arrancando un árbol con la mano derecha para luego usarlo en sus labores, y con la mano izquierda está plantando una araucaria, que también puede ser un coigüe de raíz larga, "de acuerdo a los ojos de quien lo mire".
Sobre la cabeza además hay un águila que simboliza la libertad, y al lado derecho una media luna que representa el tiempo que usaban los indígenas para orientar cultivos y cosechas, como una guía del cosmos, "y que tiene que ver directamente con la sabiduría del pueblo mapuche", detalla Pichuante.
Generosidad
Para Eugenio Salas, jurado del concurso y asesor de la Fundación Huilo Huilo en temas de patrimonio, la convocatoria no puso énfasis en la competencia, en los premios, "sino que fue apenas una excusa para reunir a los participantes en un acto de generosidad de todos ellos, y del compromiso que tiene la fundación con el territorio".
"Tenemos un paisaje extraordinario: cordilleras, ríos, lagos, naturaleza. Entonces, ese paisaje natural, para profundizarlo, para hacerlo escalar tenemos que agregarle el paisaje cultural. Cuando tú vez esculturas desplegadas en un aserradero, este lugar deja de ser un aserradero y se transforma en un espacio patrimonial, con obras instaladas ahí generosamente por sus autores que lo dejan para la gente de la zona y la región, para los visitantes".
Los premios
Según las organización, los objetivos del concurso han sido fortalecer, rescatar y difundir la identidad natural y cultural de la Región de Los Ríos a través de una propuesta artística de intervención en madera. Para ello, se buscó permitir a cada artesano representar una temática para potenciar la valoración de comprensión del patrimonio del territorio.
En ese margen, el primer lugar que obtuvo Mauricio Pichuante, se tradujo en un premio de 1 millón de pesos, en tanto Américo Robles, de Isla Negra, se adjudicó el segundo puesto y un premio de $600 mil. Por último, Jorge Fuentealba, de Neltume, obtuvo $400 mil por su tecera puesto.