10 mil 922 jóvenes cotizan en Los Ríos según la Asociación de AFPs
DESDE EL GOBIERNO. El seremi del Trabajo y Previsión Social Feda Simic, relacionó las cifras con la informalidad del empleo y destacó un proyecto de ley que crea un contrato especial para jóvenes trabajadores, que además estudian.
En la región de Los Ríos hay diez mil 922 jóvenes que cotizan. De esta cifra, mil 920 son menores de 20 años y nueve mil dos tienen entre 20 y 25 años, así lo evidenció el estudio "Situación previsional de los jóvenes", de la Asociación de AFPs.
A nivel nacional, los cotizantes menores de 20 años son 124 mil 174. En tanto, en el rango de 20 a 25 años, 543 mil 567. En Chile, los jóvenes representan el 12 por ciento del total de los cotizantes.
Las regiones Metropolitana, Valparaíso y Biobío son las que tienen mayor número de jóvenes que cotizan. En tanto, Magallanes, Aysén y Atacama son las que registran cifras más bajas.
Según el estudio, en las diferencias que existen entre las regiones hay una relación entre el total de población, la fuerza laboral y los sectores económicos presentes en cada territorio.
En promedio, los jóvenes comienzan a cotizar a los 27 años. De acuerdo al informe de la Asociación de AFP, la edad promedio desde que se creó el sistema aumentó de 20 a 24 años en las dos primeras décadas, lo que tiene un impacto negativo de un 35 por ciento en el monto de la futura pensión, ya que el ahorro realizado entre los 20 y 30 años corresponde al 40 por ciento de la pensión.
En su mayoría, los jóvenes que cotizan son hombres, los que representan el 58 por ciento, mientras que las mujeres alcanzan el 42 por ciento.
En el grupo de jóvenes cotizantes menores de 20 años, el ingreso bruto promedio de los hombres es de 352 mil 948 pesos, y de las mujeres es de 294 mil 310 pesos.
En tanto, en el rango de 20 a 25 años en los hombres el promedio del ingreso bruto es de 495 mil 406 pesos, y de las mujeres es de 452 mil 927 pesos.
Ahorro previsional
En materia de ahorro previsional voluntario, el estudio arrojó que sólo un 5,3 por ciento de los jóvenes del país tiene una cuenta activa.
Hay 17 mil 81 cuentas de ahorro voluntario en el segmento de jóvenes menores de 20 años y hasta 25 años.
En tanto, el 49,7 por ciento de las cuentas de ahorro voluntario de jóvenes menores de 20 años y del tramo 20 a 25 años se concentran en el fondo E.
De acuerdo al estudio, la segunda opción de los jóvenes menores de 20 es el fondo A, seguido por el C. Mientras que en el tramo de 20 a 25 años la segunda opción es el fondo C, seguido por el A.
Informalidad laboral
El seremi del Trabajo y Previsión Social, Feda Simic, relaciona que los jóvenes estén o no cotizando con la formalidad e informalidad del empleo.
Explicó que los jóvenes que se encuentran en el segmento de 18 a 24 años y que estudian, por lo general, además trabajan en "pitutos", por lo tanto no inician actividades ni cotizan.
"Al trabajar formalmente e ingresar al Servicio de Impuestos Internos, pagar salud y AFP, las universidades les quitan los beneficios; esa es una barrera para que puedan desarrollar una ocupación formal", planteó Simic.
La región de Los Ríos presenta entre los años 2010 y 2017 una tasa de ocupación informal de los trabajadores asalariados de, en promedio, aproximadamente de un 25 por ciento. Ésta se ve incrementada en el caso de los jóvenes asalariados (15 a 29 años), alcanzando un promedio anual de 32 por ciento.
En 2017, la tasa de ocupación informal en trabajadores asalariados jóvenes de la región (asalariados informales/asalariados totales) fue de un 26,2 por ciento, según la información proporcionada por analistas cuantitativos del Observatorio Laboral de Los Ríos.
"Cabe destacar la alta informalidad presente en los trabajadores asalariados en la región, alcanzando un 20,1 por ciento en el año 2017, diferencia del 16 por ciento a nivel país, donde además el grupo de asalariados jóvenes, que representa un 26,2 por ciento del empleo asalariado regional, son trabajadores que se encuentran trabajando fuera de la ley y no están sujetos a protección social ni prestaciones de salud, a pesar de tener una relación de dependencia formal con sus empleadores", señalaron.
Los trabajadores asalariados son aquellos que, independientemente de su situación contractual, poseen una relación de dependencia con un empleador, es decir, su remuneración depende directamente de los ingresos de la unidad económica para la que trabajan, tienen un jefe -eventualmente su empleador- y la remuneración típica a su trabajo son los sueldos y salarios.
En cuanto a la formalidad (o informalidad) de la ocupación, explicaron desde el Observatorio Laboral que esta clasificación se realiza a partir de la observación del pago o no pago de prestaciones de salud y previsionales, de acuerdo a lo que indica la legislación laboral nacional.
Esta situación -indicaron- es análoga a lo observado por el Instituto Nacional de Estadísticas en sus boletines de 2017, donde los rangos etarios más vulnerables en cuanto a la informalidad son jóvenes y personas mayores.
Contrato especial
En ese sentido, Simic destacó el proyecto de ley que crea un contrato especial de jóvenes estudiantes trabajadores. Esta iniciativa fue ingresada por el Presidente Sebastián Piñera en 2013 y actualmente está en primer trámite constitucional en la Cámara de Diputados.
El seremi indicó que el proyecto de ley regula el nuevo contrato especial para trabajadores estudiantes entre 18 y 24 años de edad, que se encuentren cursando estudios regulares o en vías de titulación en instituciones de educación superior o en programas de nivelación de estudios.
"El contrato establece que los jóvenes puedan trabajar formalmente máximo 30 horas en la semana que no podrán distribuirse en más de seis días", especificó y añadió que la ventaja es que podrán optar a mantener su calidad de carga legal-médica de sus padres hasta los 24 años.
Además, el proyecto de ley define que la remuneración que el trabajador estudiante perciba no se considerará renta para el Registro Social de Hogares, el Fondo Solidario, el Crédito Fiscal Universitario y Crédito con Garantía Estatal ni para cualquier otro sistema de crédito, subsidio o beneficio que tenga por objeto financiar estudios en una institución de educación superior o gastos asociados a ellos.
"Con esta iniciativa, se busca sacar a los jóvenes que están trabajando de la informalidad y, con ello, aumentar el empleo formal en el rango de edad de 18 a 24 años", indicó el seremi.
Asimismo -dijo- aumentar el monto de las pensiones futuras al promover el trabajo formal a temprana edad y reducir las altas tasas de desempleo juvenil y anticipar el ingreso de los jóvenes al mundo laboral, dotándolos de experiencia que requieren en muchos empleos.