Cuentos con sabor a realidad
Periodista
Un niño escapa del hambre gritando los goles del equipo de sus amores; una mujer descubre que al fondo de una pileta hay más que solo peces; un ex convicto se reinventa barriendo cuanta superficie se le pone por delante; y un enigmático vendedor de libros exige un compromiso real con las obras adquiridas. Todos estos personajes tienen dos cosas en común: son tan humanos como la ficción lo podría permitir y además, conviven en un mismo universo en "Cuentos al merkén" (Arttegrama).
Es el debut editorial de Jorge Muñozo, que luego de varios años compartiendo sus relatos en redes sociales decidió imprimir una selección de ellos sobre papel Bond. Así es que puso en 80 páginas los relatos "Hincha solitario", "Vijesé", "Los peces de colores" y "El barredor", entre otras propuestas marcadas por la cotidianidad. Las historias bien pudieron haber ocurrido en una población, una plaza o un pueblo cercano al lector. Son ambientes que por su aspecto común y corriente esconden a grandes héroes de sus propias realidades. Estas voces, hasta ahora anónimas, son rescatadas por el autor en un ejercicio que tiene como base su propia observación de diversos lugares habitados y por los que ha pasado durante sus largos años como adicto a los viajes.
De esta manera es que Muñozo se pasea con soltura por la miseria, el humor negro, la nostalgia y la picardía a la cual remite con el merkén, aquel aliño preparado con ají seco ahumado que descubrió cuando se vino a vivir al sur. La construcción es de momentos ajenos, pero también propios. O al menos eso se puede deducir en cuentos, como por ejemplo "Besos a la mala" (que bien le podría costar una reprimenda del feminismo) y "Lonko libros", donde hay más de una pista para conocer al lector desde sus propias vivencias.
Al escritor se le puede seguir en Facebook, donde está como Ciudadano Muñozo y donde sigue compartiendo su creatividad escritural.
Daniel
Navarrete