Rusia abandona el tratado de desarme nuclear y acusa transgresión de EE.UU.
ARMAS ATÓMICAS. Putin respondió a la decisión de Trump de salir del pacto, junto con mostrar una imagen satelital con la ampliación de una fábrica de armas.
El Presidente de Rusia, Vladimir Putin, ordenó ayer a sus ministros de Relaciones Exteriores y Defensa cesar las conversaciones de desarme con Estados Unidos, tras anunciar la suspensión del tratado de desarme nuclear (INF), en respuesta al ultimátum de seis meses dado por el Gobierno de Donald Trump, que el viernes anunció la misma medida, así como el inicio de su retiro del pacto, proceso que terminaría en agosto. En paralelo, el Kremlin reveló una foto aérea de una presunta fábrica de armamento estadounidense.
"Respondemos de manera simétrica. Si nuestros socios de EE.UU. han anunciado que suspenden su participación en el tratado, nosotros también lo suspenderemos", dijo Putin tras reunirse con los titulares de Exteriores y Defensa, Sergei Lavrov y Sergei Shoigu.
"No debemos implicarnos y no nos implicaremos en una carrera armamentista que sería muy costosa para nosotros", agregó el Mandatario. "Partimos de que Rusia (...) no desplegará misiles de medio y largo alcance en Europa, ni en otras regiones del mundo, antes de que armas similares de fabricación estadounidense aparezcan en las respectivas regiones del mundo", señaló Putin, en referencia a la tensión por la instalación de misiles de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) cerca de Rusia -que no es parte del grupo, al contrario de EE.UU. - y de países en su esfera de interés.
Putin, sin embargo, se ha mostrado favorable a iniciar el desarrollo de un nuevo misil supersónico de medio alcance, según un comunicado del Kremlin al que tuvo acceso la agencia de noticias DPA.
Arsenal estadounidense
La Defensa rusa reveló ayer una imagen satelital de una planta de la corporación militar estadounidense Raytheon, que presuntamente comenzó en 2017 los preparativos para fabricar misiles prohibidos por el tratado nuclear que ambos países suspendieron, entre acusaciones mutuas de haber violado sus términos.
La imagen, tomada por un satélite el 3 de diciembre de 2018, muestra una planta cuya área, según las autoridades rusas, aumentó en un 44%, de 55 mil a 79 mil metros cuadrados, mientras que el número de empleados de la empresa creció en casi dos mil personas.