Casi comienza el otoño
Docente
kinesiología UST Valdivia
Ya casi comienzan los días fríos y las posibilidades para la práctica de ejercicio físico de manera sistematica al aire libre, se reducen considerablemente, aun así, se debe seguir realizando este tipo de actividades. Diversas investigaciones de carácter científico han demostrado que el ejercicio físico regular incrementa las habilidades del adulto mayor, reduciendo los riesgos de enfermedades crónicas y bajando la tasa de mortalidad
La práctica de ejercicio físico de manera sistemática para este grupo etario acarrea una serie de beneficios a nivel metabólico, además de mejorar el ánimo, evitar el sedentarismo, compensar la ingesta excesiva de alimentos y en directa relación con la mejora de la calidad de vida.
¿Cómo hacer ejercicio en épocas de precipitaciones y temperaturas bajas? En relación a esta duda nace la necesidad de planificar la práctica de ejercicio físico en espacios techados o cerrados, con la finalidad de disminuir la exposición de los adultos mayores en ambientes poco favorables y propicios para la adquisición de enfermedades de todo tipo.
Algunos de los puntos a considerar al momento de ejercitarse en otoño para el adulto mayor deben ser, por ejemplo, poseer las vacunas correspondientes a la época invernal y realizar un calentamiento entre 5 a 15 minutos de manera general, con un máximo de 20 ejercicios no sobrepasando las 10 repeticiones por ejercicios. Utilizar el ejercicio físico como medio para subsanar enfermedades, sin lugar a dudas, repercutirá en la mejora de capacidades deterioradas del adulto mayor.
Felipe
Poblete