Redacción

L a Compañía Siderúrgica Huachipato, filial de CAP, suspendió todas las operaciones en la mina de piedra caliza en la isla Guarello, de la Región de Magallanes, para concentrarse en las actividades de limpieza de los 40 mil litros de petróleo diésel derramados en la bahía desde su terminal marítimo.

El gerente de Sustentabilidad, Pablo Pacheco, afirmó que una vez ocurrido el hecho, el sábado pasado, se activó todos los protocolos fijados para este tipo de incidentes. "Tras el incidente, se iniciaron de forma inmediata las faenas de extracción del hidrocarburo del medio marino", a cargo de treinta personas, añadió.

Contienen y fiscalizan

En el lugar ya se encuentran, desde el domingo, la barcaza Elicura, de la Armada. Ese mismo día, la institución reportó que las condiciones meteorológicas de fuertes vientos, de más de cien kilómetros por hora, han contribuido a la contención en el sector sur de la bahía y que las primeras acciones permitieron contener y recuperar cerca de 15 mil litros de agua de mar contaminada.

A la zona también arribó el patrullero oceánico Marinero Fuentealba, que trasladó material especializado para la mitigación del vertimiento: barreras, paños y rollos absorbentes, recolector de hidrocarburos, estanque de almacenamiento temporal, bomba centrífuga, entre otros, que empezaron a usarse ayer.

CAP sumó a los operativos la barcaza San Andrés, que llegó ayer con biólogos y material especializado.

Ayer, en tanto, el superintendente (s) de Medio Ambiente, Rubén Verdugo, aseguró que el organismo realizará, desde hoy, una fiscalización en terreno junto al Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin) y la Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC). Esto, con el fin de verificar in situ las causas del incidente.

La autoridad precisó que el trabajo será "cotejar en términos prácticos y muy concretos si efectivamente sólo fueron 40 mil litros o más". Verdugo expuso que se aplicará "algunas lecciones aprendidas a propósito de lo que vivimos el año pasado en Quintero y a propósito de aquello a lo que nos conminó la Corte Suprema", y que en virtud de esto los servicios actuarán de manera coordinada.

Consultado sobre si el accidente en la bahía de la isla Guarello se debió a un error humano, el superintendente (s) no quiso confirmarlo.

La decisión del presidente de la Cámara de Diputados, Iván Flores (DC), de encargar un estudio sobre la viabilidad de trasladar el Congreso Nacional a Santiago, reactivó la controversia sobre la sede del Poder Legislativo.

En entrevista con El Mercurio, el legislador argumentó que sería más eficiente tener el Congreso cerca del Ejecutivo y que reparar el edificio de Valparaíso -por problemas estructurales que, según él, presenta- tendría un alto costo, de 6 mil millones de pesos, superior aun a lo que significa llevar de vuelta el Congreso a la capital.

El líder del Senado, Jaime Quintana (PPD), apoyó la propuesta, porque "es mucho más eficiente tener los tres poderes del Estado funcionando en la misma ciudad". Recordó que si bien se puede hacer sesiones de comisión, tanto del Senado como de la Cámara, en Santiago, en esta ciudad "no es posible hacer sesiones de Sala". Por esto, propuso a Iván Flores que "debiéramos partir con el cambio legal pertinente para posibilitar que se pueda sesionar en Sala también en Santiago".

La diputada de Renovación Nacional Paulina Núñez dijo incluso que "no se necesita estudios para trasladar el Congreso a Santiago. El Congreso tiene que estar donde gaste menos y todos sabemos que es en Santiago". De todos modos, pidió al presidente de la Cámara que "si está preocupado por los recursos públicos, primero se la juege por bajar el número de parlamentarios", lo que, a su juicio, es urgente.

El senador de Revolución Democrática por la Región de Valparaíso, Juan Ignacio Latorre, no se opone a estudiar y discutir un traslado, pero matizó el tema: "Si las razones son económicas, yo pediría al presidente de la Cámara que el estudio incorpore propuestas alternativas, como reducir la dieta parlamentaria, los viáticos, gastos que podrían ser considerados privilegios o accesorios. Podría haber un plan de austeridad del Congreso".

Latorre reconoció, eso sí, que si las cámaras pudieran sesionar en Santiago para votar algunos proyectos, habría un ahorro de tiempo y recursos.

A su juicio, que el Congreso funcione en Valparaíso fue una señal de descentralización, pero no ha tenido un impacto positivo en este ámbito. De todos modos, adelantó que "no hay agua en la piscina" para que, en el corto plazo, prospere la idea de Flores".

Cientos son los venezolanos que siguen haciendo fila en las afueras del consulado chileno en Tacna, en Perú, pese a que la atención se retomará mañana.

Esto último, pues en ese país están celebrando las Fiestas Patrias: ayer y hoy son feriados, y no se trabaja.

Según reveló Radio Biobío, más de 600 son los venezolanos que intentan, infructuosamente, ingresar a Chile. En la zona aledaña al edificio del consulado, hay unas 120 carpas, lo que ha provocado molestia en la autoridad local. El sábado, el gobernador de Tacna, Juan Tonconi, amenazó a Chile con quitar el edificio si no se soluciona el ingreso de los venezolanos a nuestro país con rapidez.

Una mujer venezolana entrevistada por la emisora aseguró que hace 22 días está intentando obtener los papeles que le permitan hacer ingreso a Chile. En su caso, no ha sido posible pues su hija nació hace cuatro meses en Colombia, por lo que tiene nacionalidad de este último país. Agregó que pidió refugio en el consulado chileno pero no se lo dieron.

La atención en el consulado chileno, ubicado cerca de la vieja estación de trenes de Tacna, se retomará mañana a las 8 horas, pero aun así son muchos los migrantes que permanecen en la fila para no perder lugar.

Radio Biobío reportó que familias chilenas siguen yendo al lugar para prestar ayuda a los venezolanos, sobre todo con alimentos y bebidas.

Soberanía

La tensión por la situación en Tacna se mantiene tensa. El ministro del Interior, Andrés Chadwick, respondió al gobernador Tonconi y dijo que sus dichos son "expresiones fuera de todo lugar".

"En materia de migraciones, vamos a ser muy claros para hacer cumplir la ley. Van a ingresar aquellos extranjeros que cumplan con los requisitos legales. Es decir, que no tengan prontuarios policiales y que cumplan con todos los requisitos y exigencias que establece la ley", agregó la autoridad.

Andrés Chadwick recalcó que "ningún país nos va a venir a presionar para efectos del ingreso de migrantes a nuestro país. Chile es completamente soberano, vamos a ejercer nuestra soberanía y en Chile se respeta la ley tanto para los nacionales como para los extranjeros".