Demandas ciudadanas
Ya van 21 días de movilizaciones y la indiferencia del Gobierno está lamentablemente, dando paso a la violencia. Ya es minuto que el Ejecutivo, el Presidente se comprometan con una Nueva Constitución. En el Congreso ya estamos trabajando en las reformas y hemos propuesto una agenda corta con real sentido social, en materia de pensiones dignas, salud, educación, medio ambiente, de frenar abusos. Pero la sordera está dañando nuestro país, nuestras ciudades, nuestro Valdivia.
El Presidente debe estar a la altura, escuchar al pueblo y acoger las demandas que clama la ciudadanía en forma pacífica en las calles, y terminar con su indiferencia que da paso a grupos violentistas que buscan destrucción e infundir el terror, afectando fuentes laborales, generando inseguridad, dañando nuestras ciudades. Además, en estas tres semanas el dolor se ha hecho presente en familias que perdieron seres queridos, que resultaron con daños oculares permanentes o cuyos hijos menores de edad han sido maltratados. Imagino que esta no es la idea del gobierno, y por ello, esperamos pronto respuesta a las peticiones que hemos realizado en materia de nueva Constitución y demandas sociales.
En el Senado ya se encuentran los proyectos de reformas constitucionales que hemos presentado para convocar a plebiscitos y que regulan la convocatoria a una asamblea constituyente, lo que permitiría avanzar en el necesario proceso para una nueva Carta Magna que sea, efectivamente, la casa común de todos los chilenos y chilenas.
Alfonso De Urresti L. Vicepresidente del Senado
Patrimonio destruido
La corte Penal Internacional ha declarado como delito contra la humanidad la destrucción de patrimonio cultural y ya tiene los primeros condenados. Esto es justo después de ver que los talibanes destruyeron los budas gigantes de Afganistán y los yihadistas destruyeron Palmyra, Mosul y Timbuctú.
Pero vemos que nuestro país también tiene talibanes y yihadistas que por motivos ideológicos están destruyendo nuestro patrimonio cultural en especial descabezando estatuas. Esto aparte del daño económico específico, afecta muchísimo al desarrollo del turismo y de la inversión por la imagen incivilizada del país.
Por lo menos nuestros iconoclastas criollos deberían haberle aprendido a los comunistas rusos, chinos o cubanos, que si bien podían fusilar a los contrarevolucionarios pero jamás destruir un monumento .
José Vargas Uribe josevargasuribe@gmail.com
Constituciones de O'Higgins
Cuando le correspondió asumir el mando del nuevo Estado, Bernardo O´Higgins promulgó dos constituciones, una en 1818 de carácter provisoria y otra en el año 1822, siendo las primeras a nivel nacional, si se considera que previamente solo hubo un reglamento constitucional de corta vida y alcances.
Llama profundamente la atención que el cuerpo del documento, partiera enunciando los derechos de los seres humanos, para luego caer en los deberes, dándoles sentido social a los integrantes del Estado Nación.
Se evidencia clara y contundentemente, que son los habitantes del país la principal preocupación, en las dos cartas magnas.
Pero también es atrayente la concepción que expresa el documento de los tres poderes del Estado, el ejecutivo, el legislativo y el judicial, a los que fija y regula, tanto en sus atribuciones, como en sus limitaciones.
Habida consideración del lenguaje, levemente diferente al que hoy empleamos, pareciera al leerse la mayoría de sus contenidos, que estuvieran inspirados en conceptos e ideas actuales, demostrando porque Bernardo O'Higgins fue un adelantado a su época, como asimismo, cual es el origen de su legado, que tanto bien nos haría imitar en la actualidad.
Antonio Yakcich F., presidente Instituto O'Higginiano de Rancagua
Paso a paso
Comienza a salir humo blanco en la reforma tributaria y de pensiones. El oficialismo ha hecho las veces de mediador y ahora de oyente de las propuestas de los senadores de la centroizquierda y esta última ha conservado algunos elementos que La Moneda propuso.
El famoso win-win, así es toda negociación. Claramente ambas reformas no serán idénticas a las que propuso el presidente Sebastián Piñera en 2017 para ganar los comicios presidenciales, y tampoco serán la panacea que la oposición desea. Ambas ideas no son más que soñar despierto, un baladí. En los acuerdos, ambas partes deben ceder.
Paso a paso se transita por un camino que intenta resolver las urgencias sociales del país para salir adelante. No debemos olvidar el mal pasar económico actual por el vandalismo y la delincuencia. Sí seguimos bajando nuestro crecimiento económico y productividad, poco y nada de lo que se pretende en gasto social se podrá realizar. Es vital retomar, también, nuestra agenda productiva y laboral.
Jose Luis Trevia jtrevia@fppchile.org