De árboles y antepasados
¡Esta inconmensurable ternura de hojas, este fuego verde encendido dentro de ti, esta espesura de hojas derramada en tu interior!: es "reencontrarse con el antiguo olor de los ciruelos plantados en el fondo del patio, donde todavía llegan los pájaros a esperar que alguien abra la puerta y les arroje la comida, es comulgar con la tierra, entrar en la casa de los vivos y los muertos y saludarlos uno por uno" (Enrique Valdés, Trapananda, pág. 170).
Los viejos manzanos florecen, los jóvenes ciruelos reverdecen. Madera de esta madera, astillas de tus astillas, eres este meditado fruto del tiempo, el meditado y extraño dulzor de antiguos árboles que otros plantaron; sangre desconocida de mi sangre, los pienso: "los hijos son de cualquier parte, es un refrán que no recuerdo. Pero ahora lo siento […] Algo no está tranquilo en mí y debe ser el agradecimiento del que le hablan a uno en todas partes" (Enrique Valdés, Ventana al Sur, pág. 11).
Este fuego verde que ahora ves, esta inconmensurable ternura de hojas en días temiblemente iluminados, la vieron también esos buenos antepasados que no llegaste a conocer. ¡Oh generosos habitantes que hubiera querido conocer y no pude!, los pienso, los siento, avanzando entre el gentío de la marcha, o detenido un buen rato bajo el rumor de los ramajes, porque "ahora el tiempo ha diseminado las distancias y esparcido su amor para juntarlo todo" (Ventana al Sur, pág. 12). Mensaje inscrito en la piedra para ti: "justo es acudir en ayuda también de los que vivirán después de nosotros, pues también ellos son algo nuestro aunque no hayan nacido" (Diógenes de Enoanda, mediados del siglo II d.C.).
Juan Navarrete Espinoza Licenciado en Historia Uach juanepdic@live.cl
Preguntas y respuestas
En ciencia, que es un estilo de pensamiento y acción, las preguntas son más importantes que las respuestas. Sin dudas, expresadas en forma de preguntas, no hay razonamiento posible.
Me pregunto: ¿ Cómo es posible que, teniendo la Constitución que nos rige, vicios de origen, haya parlamentarios y personas que han desempeñado cargos de representación popular o de confianza del Presidente que critican las normas constitucionales que permitieron su acceso a altos cargos?
Omar M. Henríquez F. omanuelito75@gmail.com
Crisis y valores
Vengo de un país que lleva más de 20 años en crisis y que, en nombre de la desigualdad, esta situación se ha agravado generando un país más igualitario. Hoy, en Venezuela, la mayoría son igualmente pobres; nadie tiene acceso a servicios básicos como el agua, la luz y la comida; de igual manera se mueren los seres humanos por falta de atención médica, todos sufren de inseguridad, y la corrupción y la falta de derecho se aplican en forma igualitaria.
Como inmigrante y habiendo vivido una experiencia traumática de descomposición social de mi país, quisiera compartir la experiencia de lo que me enseñó la crisis, considerando las diferencias de circunstancias y contextos entre países para evitar que la sociedad chilena llegue a lo mismo: los valores.
Las desigualdades son motivos reales y nobles de diferencias que muchas veces terminan en graves crisis. Entonces, identificado el problema en su conjunto, lo que demuestra que Chile es una sociedad desigual, debemos concentrarnos en la solución y no seguir en un proceso de parálisis por análisis que lo único que hace es alimentar la crisis y generar un círculo vicioso de destrucción con resultados negativos inimaginables.
Nadie pone en duda que es necesario trabajar para disminuir esta realidad cada día. Eso sí, si cada uno, sin importar el rol o condición, logra superar el sentimiento de injusticia y rabia que nos genera el problema de la desigualdad y nos comenzamos a focalizar en que todos podemos ser parte de la solución, además de resaltar que los valores se deben imponer a las emociones negativas, comenzaremos a ver rápidamente las soluciones, las cuales sin dudas moldearán el nuevo Chile que comenzó el pasado 18 de octubre.
Salvador Porta Director y Co-Fundador de Migrante
Salud mental en crisis
Frente a la actual coyuntura, los trastornos de salud mental se elevan a la altura de pandemia dejando a pocos individuos indemnes frente a la ansiedad, estrés, alteraciones del sueño y labilidad emocional.
(...) Para enfrentar esto hay algunas acciones que se puede realizar. La OMS/ Minsal recomiendan, frente a situaciones de desastres, algunas acciones relevantes: Buscar compañía y hablar; compartir sentimientos; escuchar; permitirse sentirse mal, deprimido o indiferente; realizar ejercicios físicos suaves, alternados con relajación; estructurar el tiempo y mantenerse ocupado; no evadir; tratar de mantener un itinerario de vida lo más normal posible; descansar lo suficiente; intentar comer bien y regularmente.
Saber que los sueños y pensamientos recurrentes acerca del evento traumático son normales y deben ser compartidos.
Rodrigo Venegas Psicólogo y académico USS