Argentina y Perú enfrentan su primer día de cuarentena y Brasil impide entrada de turistas
PANDEMIA. En Perú, el presidente Vizcarra destituyó a la ministra de Salud, tras la muerte de una persona que pidió el examen de coronavirus y no fue atendida.
Al comenzar el primer día de la cuarentena general obligatoria hasta el 31 de marzo, Argentina lucía ayer con menos movimiento en las calles pero con largas filas en supermercados y farmacias, de personas ansiosas por aprovisionarse y que en muchos casos no guardaban la distancia de seguridad.
En Argentina se han registrado 128 infectados y tres fallecidos, y las fuerzas de seguridad realizaban controles en las principales estaciones de trenes y otros centros neurálgicos para impedir el paso a los que no contaban con permisos especiales para movilizarse.
Durante la cuarentena se permitirán los desplazamientos para realizar compras de artículos de limpieza, medicamentos y alimentos. Los trabajadores exceptuados de guardar el régimen de aislamiento son los de la salud, alimentación, fuerzas de seguridad, servicios migratorios y medios de comunicación. Un incidente ocurrió cuando a Prefectura Naval detuvo en un puerto a un pasajero proveniente de Uruguay infectado por covid-19 por incumplir la cuarentena.
En tanto, la vicepresidenta Cristina Fernández anunció en su cuenta de Twitter que en las próximas horas viajará en avión desde Cuba a Buenos Aires acompañada de su hija Florencia Kirchner, luego de que esta finalizara un tratamiento médico en la isla de un año.
Perú, otro país que inició una cuarentena, ayer sumaba 4 personas fallecidas y 263 casos confirmados. En ese contexto se produjo la sorpresiva destitución, por parte del presidente Martín Vizcarra, de la ministra de Salud, Elizabeth Hinostroza. En su reemplazo nombró a Víctor Zamora, "un profesional con experiencia" en salud pública.
Hinostroza, médico cirujano y general de la Policía Nacional, asumió hace apenas cuatro meses y ha recibido críticas de distintos colegios médicos y enfermeras por la escasa preparación del país ante la pandemia.
El detonante fue la muerte el jueves de una persona que pasó varios días en su casa esperando que se le entregara el resultado de un examen de coronavirus y que había llamado varias veces para pedir ayuda.
En Brasil, mientras Sao Paulo anunció la instalación de hospitales de campaña en estadios y en el Sambódromo, el Senado aprobó el "estado de calamidad" en el país y de inmediato comenzaron las restricciones al ingreso de turistas, así como también se recalculó a la baja el crecimiento 2020. Ayer las cifras eran de 11 muertos por la enfermedad y los contagiados eran 806.