Durante 2019 en Chile hubo 46 femicidios; de ellos, dos ocurrieron en Los Ríos. Este año ya se han registrado 9 en todo el país y uno en Valdivia; además de 22 episodios frustrados.
Las cifras son altas y existe preocupación, porque la obligatoriedad de quedarse en casa para enfrentar el coronavirus podría aumentar también los niveles de violencia intrafamiliar en el país y en la región.
Esta inquietud, expresada por las autoridades y por diversas organizaciones de mujeres, es absolutamente fundado. Los estudios que permiten caracterizar los hechos indican que la mayor cantidad de crímenes de género que se registran de día ocurren los sábados (17.1% de los casos) y que aquellos que se producen de noche se concentran en la madrugada del domingo (23.5%). También se sabe que los episodios de violencia intrafamiliar contra mujeres y menores se incrementan durante los fines de semana, sobre todo asociados a la ingesta de alcohol.
Esto implica que la convivencia dentro del hogar obligada debido al coronavirus puede implicar mayores riesgos en esta materia, por lo cual es necesario tomar resguardos que permitan ayudar a aquellas personas que se encuentran enfrentando este drama social y humano.
El ministerio de la Mujer y Equidad de Género dio a conocer esta semana algunas pautas al respecto, que pueden servir tanto a las víctimas como a quienes sean testigos de estos hechos. Por ejemplo, el fono 1455, de orientación de violencia contra la mujer, funcionará las 24 horas del día; los Centros de la Mujer y las casas de acogida seguirán abiertos; habrá orientación remota y telefónica a quienes deseen denunciar; además de coordinación garantizada con las organizaciones públicas (Carabineros, PDI, Ministerio Público y Poder Judicial) que intervienen en la atención de violencia para que la red de apoyo no se rompa.
También habrá campañas de capacitación on line y a través de los medios de comunicación para reconocer signos de violencia y para fomentar una mejor convivencia, con resolución pacífica de conflictos.
La meta es acompañar a la comunidad en este momento complejo y sobre todo frente al problema de violencia de género, que se vive en uno de cada cuatro hogares nacionales .