Celebramos 60 años de vida
El 30 de marzo de 1960 se crea la Escuela de Tecnología Médica de la Universidad Austral de Chile, la primera de carácter universitario. Ese mismo año, en noviembre, se crea la Escuela de Tecnología Médica U. de Chile.
Es tiempo de honrar a quienes nos precedieron. En especial, al Dr Italo Caorsi, su fundador. Después vino la natural evolución de la profesión y el desarrollo de su pensamiento. La escuela originó para el país un curriculum de 4 años en 1970 y en 1992 innovó nuevamente con un curriculum de 5 años y por primera vez con una licenciatura en las profesiones no médicas. Hubo que vencer temores, resistencias gremiales, pero la calidad y el empuje de los nuevos profesionales vencieron esos cercos. Ello culminó en 1977 con el nuevo reglamento de laboratorios clínicos del país, en que la escuela de TM de la UACH tuvo un papel destacado. Sus egresados entendieron que había que perfeccionarse y emprendieron la formación de postgrado (Maestrías y doctorados) en diferentes países. Así, han contribuido, al desarrollo del conocimiento, descubriendo nuevos microrganismos y parásitos; detectando enfermedades desconocidas en el país, entre otras cosas. Algunos de sus egresadas son referentes internacionales en sus áreas, con libros y publicaciones científicas o dictando cursos de posgrado.
Hoy día, la anónima tarea de estos profesionales, cobra gran importancia, frente a la pandemia de coronavirus que nos azota. La Tecnología Médica constituye un puente humano entre el paciente, el médico y la ciencia, al dar el respaldo científico a las hipótesis clínicas o al aportar nuevos datos para establecer un diagnóstico. Eso, debido a la naturaleza objetiva de sus métodos, aportando para el tratamiento adecuado del enfermo por quien corresponda. Este trabajo, anónimo, es vital. El 70% o más de las decisiones médicas está basada en exámenes de laboratorio o de exploración clínica, estableciendo una fuerte asociación entre el médico tratante y el Tecnólogo Médico.
Los resultados que producen estos profesionales, son producto de una rigurosa formación científica y profesional, a la que se agrega toda una concepción social y de gestión de los pacientes. Dicho de otro modo, no generan resultados de sus investigaciones ciegamente, sino fundados en el método científico, y que junto con enviarlos al cibespacio, asumen su responsabilidad con los pacientes o la sociedad.
El futuro es nuestro. Nadie nos va a regalar nada. Los tiempos nos obligan a recuperar los liderazgos, a desarrollar curriculum innovadores que ausculten las tendencias futuras, en las diferentes especialidades, en beneficio de los pacientes y el país.
TM, M Sc, Dr Sc Luis Zaror Cornejo Ex Director de Escuela de Tecnología Médica Universidad Austral de Chile
Retiro del 5% de AFP
AFP Uno, la ganadora de última licitación de afiliados, ha propuesto el retiro de un 5% de los ahorros previsionales para hacer frente a la crisis económica producto del coronavirus.
En primer lugar es necesario aclarar que sólo una propuesta y que la normativa legal imposibilita el retiro de fondos que no sean destinados como pensión, por lo que no hay que generar falsas expectativas.
En segundo lugar, del punto de vista técnico, lo que es una solución en el corto plazo, es un importante daño a las futuras pensiones, si consideramos el efecto del interés compuesto sobre ese 5% en el largo plazo, además de hacer efectiva la pérdida por las bajas de los multifondos.
Medidas como postergación de cuotas del crédito hipotecario, uso del seguro de cesantía o los bonos del Gobierno son las que apuntan en la dirección correcta, pues no tienen mayores efectos colaterales, ni menos en las futuras pensiones.
Eduardo Jerez Sanhueza eduardomasprevision.cl
Nadie entra, nadie sale
Daniel Mañil, el más joven de los fallecidos por coronavirus en Chile, murió en el Hospital de Molina, era un hombre en situación de calle y reunía todas las condiciones para que el Covid-19 se ensañara con él.
Como Hogar de Cristo hemos insistido en que las más de 15 mil personas que viven en situación de calle en Chile son la población más indefensa frente a la pandemia y que se requiere de acciones coherentes y multisectoriales para protegerlos. Vacunarlos contra la influenza fue una, pero hay mucho más que hacer.
En nuestro territorio, está la Hospedería de Hombres, que acoge a más de 35 personas. Y la hemos declarado en cuarentena preventiva para evitar que sus usuarios se contagien al entrar y salir de ella. No es una medida fácil. Las personas en calle son naturalmente libres, les cuesta la convivencia, viven al día y necesitan juntar sus monedas. El cierre de nuestras puertas ha significado ampliar los servicios de alimentación, organizar actividades recreativas, pero sobre todo un compromiso con los que se quedan dentro: si salen, no podrán volver a entrar por el riesgo de contagio. Esto significa también que no se permitirán nuevos accesos una vez declarada la cuarentena, una medida drástica pero necesaria, dada la alta capacidad de propagación del coronavirus.
Pedimos a todos ayuda, especialmente a quienes puedan aportar con los escasos insumos sanitarios de seguridad, como guantes y mascarillas, que requerimos para extremar la seguridad.
Claudia Ruiz Hogar de Cristo Los Ríos
