Correo
Atisbo de esperanza
Para quienes ejercemos cargos públicos, el día del Dirigente Social reviste una enorme importancia, ya que representa la oportunidad de agradecer y resaltar la labor que cumplen desinteresadamente en pro de su comunidad. Son ustedes los líderes innatos que representa la voz de sus vecinos y constituyen en puente entre quienes llevamos adelante las políticas públicas y los habitantes de la región.
Hombres y mujeres que hacen sentir sus demandas, anhelos y sueños y que trabajan incansablemente hasta lograrlos. Nos impulsan a levantar iniciativas donde nunca las pensamos o quizás las pensamos de otra forma, sin necesariamente recoger el saber que está en los barrios, calles y poblaciones de nuestras ciudades.
Ustedes son la fuente de conocimiento que nos permiten que las políticas públicas sean más equitativas e integradoras. En especial en un ministerio como el nuestro, con un fuerte componente social, y en donde es imposible construir una obra, sino es participativamente y mano a mano.
Por ello y porque en estos tiempos difíciles. ustedes han estado atentos a acudir al apoyo de sus vecinos y vecinas, no quiero dejar pasar la oportunidad de agradecer su esfuerzo y dedicación. Así como también, enfatizar que nuestro Gobierno y el particular el ministerio encabezado por Felipe Ward, tiene como norte, trabajar en pro de más y mejor calidad de vida para todas y todos.
Tengan la certeza de que nuestro accionar no ha cesado y que por el contrario en estos meses hemos incrementados iniciativas en ayuda a la comunidad, porque sabemos que es una urgencia entregar soluciones, escuchar sus demandas y seguir construyendo juntos. Un trabajo impensable sin ustedes, ya vendrán los tiempos del reencuentro y los abrazos. Hoy, sólo me resta, decirles:¡Feliz Día del Dirigente Social!
Feda Simic Seremi de Vivienda de Los Ríos.
Ayuda en pandemia
Los últimos meses han sido complejos para todo el país. No sólo hemos tenido que enfrentar la peor pandemia de los últimos 100 años, sino que también muchas familias han visto mermados sus ingresos o sus fuentes laborales -se estima la pérdida de dos millones de puestos de trabajo en los últimos 12 meses-, haciendo de esta crisis la peor que haya enfrentado el país en casi cuatro décadas.
Por eso, es importante conocer algunas de las medidas que se han tomado para afrontar este problema, sobre todo, para la llamada clase media que cotiza en Isapres. En abril pasado, la Superintendencia de Salud instruyó a éstas a abrir un proceso extraordinario para la devolución de excedentes a todos sus afiliados, que entregará lo generado entre enero y junio de 2020. Esto permitirá que más de un millón de personas podrán ocupar, de forma directa y como estimen conveniente, los ahorros formados cuando el pago obligatorio del 7% excede al valor del plan convenido con la institución de salud.
Esto dará la posibilidad a los cotizantes de ocuparlos en el copago de bonos, en la cobertura de sus planes e, incluso, en medicamentos y productos en todas las cadenas farmacéuticas, hecho que se presenta como un alivio -sobre todo- para enfermos crónicos o que consumen varios fármacos a la vez. No olvidemos que de acuerdo a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (Ocde), Chile es el tercer país con el mayor "gasto de bolsillo" en salud, representando un 5,2% total de los hogares. Dentro de este gasto, el 38% se va al ítem de medicamentos, siendo el más alto en este desglose.
Además, y hoy más que nunca, es fundamental reforzar la aplicación de la Denominación Común Internacional (DCI), que entrega el nombre genérico de los fármacos en las recetas médicas. Esto permitiría a los pacientes ampliar el acceso a medicamentos genéricos, bioequivalentes o de innovación, en orden a sus necesidades y presupuestos. En nuestro país no existe normativa que regule este ítem, por lo que dependerá de cada profesional médico su aplicación.
Sabemos que esta pandemia es una situación de crisis sanitaria y económica que requiere de mecanismos de apoyo directo a las personas. En un país donde la salud es costosa, todos los actores del sistema debemos seguir trabajando incansablemente para mejorar el acceso y las condiciones.
Paula Molina, Químico farmacéutico.
Atisbo de esperanza
Para las víctimas de esta violencia desatada, las palabras del nuevo jefe de gabinete son esperanzadoras.
El ministro, como ex parlamentario del Bío Bío, sabe perfectamente cuál es el daño que están haciendo los terroristas, con un grave saldo que todos sabemos, costos de vidas humanas, heridos, quema de propiedades públicas y privadas, además de la destrucción de camiones y maquinarias agrícolas y forestales.
Sin embargo, y siendo conscientes de la que la paz no depende de una autoridad o el Gobierno de turno, para lograrlo es imperante la disposición de todos los sectores. La violencia es violencia por donde se mire. No es cuestión de raza ni género. Chile necesita unidad y los parlamentarios debieran ser los primeros en dar el ejemplo.
Ricardo Oyarzún González