Desocupación y más prevenciones
En la región hay mas de 26 mil personas sin trabajo. La cifra es una de las más altas de las últimas décadas en esta zona. Hay nuevas restricciones que afectarán la economía. En particular, pueden dañar el empleo femenino, que se concentra en ventas y servicios.
La tasa de desocupación de Los Ríos llegó a 15,9% en el trimestre junio - agosto, empinándose con largueza por sobre el 12,9% nacional. Son cifras de dos dígitos muy preocupantes, que no se veían hace décadas en la zona y que, lamentablemente, podrían subir luego del retroceso en el proceso de desconfinamiento que han sufrido 6 de las 12 comunas.
Esa decisión de prevención por el coronavirus se traducirá en cierre de comercio y restaurantes; en restricciones de salidas y reuniones sociales; de accesos a la región y postergación del -ya polémico- regreso presencial a clases. Todo lo cual tendrá consecuencias económicas, por supuesto.
En particular, esta nueva realidad restrictiva, puede dañar el empleo femenino, que se concentra especialmente en las áreas de servicios, y eso paralizaría algunos pequeños repuntes registrados en los últimos meses. Por ejemplo, las cifras del Instituto Nacional de Estadísticas indican que la tasa de desocupación regional de las mujeres creció en un 8,7 pp (puntos porcentuales), mientras que la de los varones fue de 12,5pp. Además la tasa de trabajo informal de las mujeres (sin contrato, ni beneficios sociales) alcanzó un 33,2%, disminuyendo en 3,0 pp. respecto al mismo período del año anterior.
Esta situación de vulnerabilidad de género en el empleo se nota a nivel nacional y hace pocos días la ministra Mónica Zalaquett (Mujer y Equidad de Género) señaló que la baja en la participación femenina en la fuerza laboral equivale a un retroceso de 10 años.
Lamentablemente, nada se puede hacer para evitar que medidas de prevención más estrictas sean aplicadas. Los niveles de contagios han crecido y la cifra total de víctimas fatales subió de 12 a 16 (25%) en las últimas dos semanas; así que no hay más alternativas que acatarlas. Lo que sí se puede hacer es asumir que ellas se habrían podido evitar, si la responsabilidad colectiva hubiese sido mayor.
Esta noticia no es la mejor para publicar , precisamente, en el día en que se celebran 13 años de la creación de la Nueva Región. Pero debiera desafiarnos a entender que prevenir no es sólo una tarea de autoridades y de fiscalización, sino especialmente de cada persona que se cuida y protege a los suyos.