Espacios para construir hogares
El anuncio de abrir un "Banco de Suelos" con 21 terrenos en Los Ríos es muy positiva y debe aplicarse con plazos acotados. Desde 2014 la región tiene iniciativas para asegurar espacios donde levantar viviendas. Ahora, ese impulso será reforzado con fondos nacionales.
Un déficit de 12 mil viviendas en la región de Los Ríos catastró un estudio de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), hace tres años. La cifra nacional ascendía a 739 mil y la revelación causó polémica en su momento, pues no coincidía con los datos oficiales, aunque reflejaba una realidad que hoy se ha acentuado debido a la pandemia. De hecho, hace pocos días, el gobierno señaló que contabiliza 600 mil casas faltantes en el país. O sea, 600 mil familias viviendo en condición precaria.
En ese contexto, resulta positivo el anuncio de la creación de un "Banco de Suelos" por parte del Minvu, idea que consiste en asegurar espacios urbanos para levantar soluciones habitacionales; algo importante, pues gran parte del déficit se produce por falta de disponibilidad de suelos aptos para construir y cercanos a servicios ciudadanos, para que no se creen barrios segregados, sino integrados a las ciudades.
La idea fue lanzada en agosto de 2020, incluye la adquisición de 120 terrenos, para 20 mil hogares a nivel nacional. En Los Ríos serán 21 recintos y 442 casas, en las modalidades de Fondo Solidario de Elección de Vivienda (DS49) y de Integración Social y Territorial (DS19).
La iniciativa es positiva, aunque no nueva en la región. En 2014 el Consejo Regional aprobó un proyecto para adquirir espacios en Valdivia, Lanco, Río Bueno, Mariquina y Paillaco; en 2017 entregó $2.579 millones al Serviu para ejecutar las compras. En 2019 fue confirmada la adquisición de lugares para cinco comités de vivienda integrados por 512 familias de Máfil, Lanco, Los Lagos y Futrono. Las propuestas debían comenzar a ejecutarse en 2020 y, aunque la emergencia sanitaria lo ha retrasado, el compromiso debe seguir vigente.
El "Banco de Suelos" anunciado, sin dudas, reforzará estas inquietudes locales ya en marcha. Es de esperar que se materialice pronto, que se definan plazos y ubicaciones, de modo que los beneficiarios no pasen largos períodos de espera (hay comités de vivienda con más de 10 años de postergación) y que, además, las obras se traduzcan en creación de empleos en corto plazo; factor básico en estos días. Claramente, la cantidad de casas a construir aún está lejos del informe de la CChC; pero se avanza.