Nuevos desafíos
Chile dio su veredicto sobre su futuro.Democrática mente la gente optó por una nueva modalidad de ejercer la política y por buscar nuevos horizontes que permitan mejor equidad, paz social y justicia entre los que tienen tanto y aquellos que nada tienen.
Las experiencias en la historia, señalan que, a veces, la gente se revela ante la desigualdad en que las sociedades viven. Ese camino eligió Chile para cambiar en algo lo que más duele; lo único que se pide que se haga con tranquilidad, con humanismo, con respeto del uno hacia el otro, dejando rencores entre los que no piensan igual entre sí. Necesitamos un país emergente, justo y humano, eso es todo lo que se pide, no enfrentarse en quién ganó ni quién perdió, porque eso no conduce a nada.
Chile acaba de decir una verdad distinta, quizás mas justa, por ello no debe sorprender que la gente se cansó de la vieja política. Sería largo enumerar todo lo que resintió a la sociedad porque los elegidos se preocuparon mas de ellos que de aquellos por los cuales fueron elegidos, esperamos con esperanzas que todo el cambio que se pueda producir sea por el bien de nuestro país, ya que los único que desea es vivir en paz en un suelo de hermanos.
Arturo Goddard Bravo Profesor Normalista normalista1949@hotmail.com
Constitución óptima
Un desafío adicional para el proceso constituyente es que hoy resulta más complejo producir una Constitución óptima.
El historiador británico Niall Ferguson advierte que "sin un sistema viable de controles y equilibrios, instituciones sólidas y limitaciones al poder, los derechos individuales no pueden ser garantizados y los valores colectivos corren el riesgo de volverse irrelevantes".
Es importante recordar que, en vez de ser listas de verificación de derechos, las constituciones desempeñan la función de comunicar las prioridades, carácter y ethos del país.
Ferguson reitera que "el reemplazo radical de una Constitución es intrínsecamente riesgoso", que no puede quedar ausente en Convención.
Martín Durán F. mduran@fppchile.org
Desconcierto
Hay hechos inesperados o sorprendentes en la vida que producen confusión o desorientación.¿Ha habido desconcierto en el mundo político por la baja participación en las elecciones de los días 15 y 16 de mayo?
El porcentaje de participación fue de un 43%, notablemente inferior al 51,12% del plebiscito de octubre del año 2020 y al 97,52% del año 1988.
El plebiscito de 1988 fue un acto de esperanza para dos opciones que buscaban la mayoría. El del año 2020 tuvo que ver con la mantención de la actual Constitución o la redacción de una nueva Carta Fundamental.
La reciente, de mayo de 2021, fue para elegir constituyentes, gobernadores, alcaldes y concejales.
Si dejamos a un lado el plebiscito de 1988, las dos elecciones que le siguieron fueron en tiempos de pandemia y de una crisis política que iba y sigue en aumento.
¿Fue el temor al virus el causante de la alta abstención o fue la expresión de desconfianza de la ciudadanía en el mundo político en el cual sus actores, de dos sectores distintos en ideología, se han dedicado a una lucha destructiva olvidando los intereses y aspiraciones de sus representados?
Ahora vemos, con sorpresa, que dentro de cada sector han comenzado los procesos de descalificación lo cual desconcierta a la comunidad, al ver lo que ocurre, en un peligroso descenso.¿Será posible lograr la tolerancia mutua y la contención? Sería bueno para Chile.
Omar M. Henríquez F. omanuelito75@gmail.com
Se nos acaba el tiempo
Las personas que padecemos asma severo en Chile luchamos cada día por respirar. Aunque es común escuchar que un conocido o familiar padece algún nivel de asma, enfermedad que en Chile se estima que la padece el 10% de la población, poco se conoce sobre el asma severo, el cual es invalidante y nos impide hacer nuestras tareas cotidianas e, incluso, nos limita a trabajar.
La mayoría de las personas con asma pueden manejar bien sus síntomas con los medicamentos habituales, que actualmente se encuentran disponibles en la canasta GES/Auge. Sin embargo, quienes vivimos con asma severo no podemos controlar los síntomas con esas terapias, incluso con dosis altas de medicamentos inhalados. Nosotros luchamos cada día por respirar y es por ello que pedimos que las terapias biológicas sean consideradas en el próximo decreto de la Ley Ricarte Soto, las cuales podrían cambiar nuestra vida y devolvernos nuestra capacidad de trabajar y de hacer nuestras actividades de forma normal, como lavarnos el cabello, acomodar la cama o caminar en un supermercado.
Se nos agota el tiempo y nosotros no podemos esperar al 2025, a un próximo decreto de la Ley Ricarte Soto.
Hay gente que está muriendo. No se olviden de nosotros, de las personas con asma severo en Chile.
Claudia Fuentes Pdta. Fundación Chile Asma