Escuela Hospitalaria está al borde del cierre por falta de recursos
EDUCACIÓN. Desde este año el establecimiento recibe financiamiento según su matrícula, la que ha bajado por la pandemia. Sus directivos indican que lo que reúnen no alcanza para los costos operacionales.
Hoy Juan Manríquez tiene diez años y cursa quinto básico en la Escuela Hospitalaria de Valdivia. Ingresó a ella cuando estaba en prekinder, ya que por su salud era muy difícil que estuviera en un establecimiento educacional diferente. Tiene una atrofia muscular espinal tipo 2 (AME) y daño pulmonar crónico. Su madre, Judith Beltrán relata: "Está a mi cargo las 24 horas del día. Hay que darle su comida, estar pendiente de él, ponerlo en la silla y sacarlo de la silla. Además no se puede resfriar, porque si se enferma le dura casi 20 días. Por eso para mí la escuelita es esencial, tenemos posibilidades de que le vengan a hacer clases a la casa y de que yo pueda ir a buscar los materiales. Nos dan muchas facilidades y mi hijo es bueno para estudiar, es súper inteligente y le gusta.".
Junto a Juan, otros 15 niños son parte de la matrícula que en pandemia posee la escuela, pero que en condiciones normales varía entre los 90 y los 70 niños. Sin embargo, esa diferencia en el número de los alumnos creada por la crisis sanitaria y ajustes en la entrega de recursos por parte del Ministerio de Educación han generado que la Escuela Hospitalaria de Valdivia se encuentre en una situación financiera crítica. Su administrador, Felipe Quezada, expresó que actualmente tienen dinero solo para este mes; en agosto ya no habrá recursos para el pago a los profesores, por ejemplo. Hoy su cierre es inminente.
Para Judith Beltrán esta noticia significaría un gran problema para su vida y la de su hijo. "Siento que ahora nos están quitando la oportunidad de que pueda estudiar. ¿Dónde voy a encontrar un establecimiento que me dé las condiciones que él necesita? Tendría que buscar una profesora particular, pero no tengo esos recursos. Además de todos los problemas que tenemos, de salud, económico, esto se suma. No sé que voy a hacer para que él estudie. No piensan en nosotros, en cómo nos sentimos las mamás. ¿Por qué los niños con capacidades diferentes siempre quedan de lado? Me siento decepcionada", dijo.
La situación
El administrador de la Escuela Hospitalaria de Valdivia, Felipe Quezada, relató que debido a la pandemia el establecimiento tuvo que dejar sus salas en el Hospital Base de Valdivia (ahora se hace quimioterapia ambulatoria en ellas) y debieron arrendar una casa para funcionar. Actualmente los niños y niñas reciben clases virtuales, sin embargo la matrícula se resintió. "Nosotros trabajamos tres modalidades: la atención domiciliaria, que no se puede hacer por la pandemia; la atención de los niños que iban al aula hospitalaria todos los días, la que hoy se hacemos online; y la atención de los niños hospitalizados por diversas patolo-
"Nuestros ahorros ya se acabaron y con lo que estamos recibiendo no cubrimos ni el 30 por ciento de nuestros costos operacionales".
Felipe Quezada, Administrador de la Escuela Hospitalaria