Código rojo
"El informe de IPCC es un código rojo para la humanidad" señaló el secretario general de la ONU, confirmando que somos nosotros los responsables de alterar el clima del planeta de forma irreversible. Aunque hay una esperanza: todavía es científicamente posible revertir el daño si se toman medidas urgentes y contundentes para reducir las emisiones de dióxido de carbono. ¡Ahora es cuando!
Debemos prestar atención a la ciencia porque se nos está acabando el tiempo. No existe un Plan B y como señala el propio IPCC, la naturaleza podrá evolucionar a un nuevo equilibrio, pero la especie humana no. El llamado es a empoderarnos como sociedad de las acciones que nos permitan hacer nuestro país cada día más sustentable, a valorar las pequeñas acciones que, sumadas, pueden producir grandes cambios. La comunidad no puede seguir ignorando la ciencia climática y las obligaciones que de ellas se desprenden.
Dr. Carlos Esse Coordinador IIDS Universidad Autónoma de Chile
Escasez hídrica
En cuanto al tema de la escasez hídrica, me gustaría mencionar lo siguiente, yo creo que toda la población está de acuerdo con la existencia de este problema, pero no sabemos cómo organizarnos y por eso sería importante que el gobierno le tome importancia a esto que nos afecta y enseñar o subsidiar espacios para reciclaje de agua "aguas grises" utilizándolas para riego de plantas, estanques etc... o realizando actividades en los colegios y en clases para que todos podamos a aprender a cuidar este vital elemento.
Pía Lagos Campos Estudiante 8° año Colegio Bicentenario Helvecia
Filosofía y pandemia
En medio del pánico y el miedo a la pandemia, es justo decir que pocos condenan la falta de filosofía en la escena. Pero la filosofía, está afecta sigilosamente en los aspectos prácticos y las decisiones que se están desarrollando en la crisis de Covid-19.
Con recursos médicos limitados, ¿a quién salvamos y por qué? ¿Cuáles son las responsabilidades de las organizaciones de salud con los médicos y de los médicos con sus familias? ¿Cómo debemos distribuir la ayuda financiera? ¿Quién es un experto y por qué? ¿Qué constituye evidencia en el modelado del nuevo virus? ¿Es aceptable rastrear pandemias con datos personales de dispositivos electrónicos? La filosofía no puede ofrecer la cura.
Una inyección de filosofía entre nuestros equipos de médicos, científicos y funcionarios públicos podría ofrecer inmunidad frente a decisiones políticas, sanitarias y personales imprudentes. En esa medida, la filosofía puede marcar una diferencia real.
Existe un importante debate en epistemología social con respecto a los expertos, el testimonio y la confianza pertinente a la crisis del Covid-19: cómo los laicos deben evaluar el testimonio de los expertos y decidir cuál de dos o más expertos es más creíble.
La confianza que tenemos en los expertos se basa en una confianza de segundo nivel: confiamos en los expertos porque otras personas en las que confiamos nos dicen que podemos confiar: es decir, en nuestro gobierno. Pero nuestra confianza en los políticos no es lo mismo que nuestra confianza en los científicos. Entonces, ¿en quién podemos confiar?
Una respuesta posible está en que todos y cada uno de los individuos tienen la responsabilidad moral de hacer lo correcto, independientemente de lo que nuestro diga o no. El juramento hipocrático, primum non nocere (primero, no hacer daño), no se aplica exclusivamente al establecimiento médico, es un principio moral que todos deben seguir, lo mejor que podamos, incluso si los costos personales son altos, y eso incluye perder dinero en unas vacaciones o perderse el Festival de Cheltenham.
Felipe Hernández CEO InvestAsia f.hernandezburgos@gmail.com
Tantos candidatos
La inscripción de candidaturas presidenciales acaba el próximo 23 de agosto, según establecen los plazos legales. El Servel reporta que hay 32 candidatos y candidatas buscando alcanzar los patrocinios necesarios para poder competir en la primera vuelta, la cifra a conseguir para oficializarse es de un poco mas de treinta y tres mil patrocinios, con los cuales los aspirantes entrarían a la anhelada carrera presidencial, pero surge la interrogante si el Estado debe invertir recursos en personajes que son efímeros en la palestra política, los votos reflejados para ser competitivo de acuerdo a datos anteriores superan los doscientos mil votos, por lo cual si bien algunos alcanzaran el piso mínimo de 33.369 firmas para aparecer en las papeletas difícilmente podrán superar esa cifra o en algunos casos la pueden hasta disminuir. Es por tanto la realidad nos revela que es necesario ampliar con creces la cantidad de patrocinios para ser oficializado, ha quedado en claro que para ser Presidente lo que prima es una voluntad colectiva y no el anhelo personal.
Javier González Barría Licenciado en Ciencias Políticas y Administrativas UdeC