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Concejo Municipal canceló el Festival Internacional de Viña del Mar 2022

SHOW. Fue aprobada solicitud de TVN y Canal 13. Escaso aforo y cuarentenas para artistas y equipos influyeron en la decisión.
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Redacción

El Concejo Municipal aprobó ayer la petición de TVN y Canal 13 de suspender la edición 2022 del Festival Internacional de Viña del Mar, tal como ocurrió con la anterior a causa de la pandemia de covid-19.

La decisión fue adoptada luego de que los concejales y la alcaldesa de la comuna, Macarena Ripamonti, escucharon las razones esgrimidas por los canales de televisión responsables de la transmisión del evento para no realizar por segundo año consecutivo el certamen.

La exposición de las razones para la nueva suspensión del Festival de Viña fue hecha por Marcelo Hilsenrad, gerente de producción de Canal 13, quien explicó que la Fase 4 del Plan Paso a Paso, en la que actualmente se encuentra la Ciudad Jardín, permitiría la asistencia al Festival de 5.000 personas con esquema de vacunación completa.

Razones de los canales

"El recinto municipal de la Quinta Vergara tiene una capacidad de 14.100 localidades. Cinco mil personas equivalen al 35%. El 100% de la capacidad de la Quinta Vergara por los seis días genera una recaudación prácticamente de 5.000 millones de pesos. Si tuviéramos el 35%, tendríamos prácticamente 3.200 millones de pesos de déficit", detalló el ejecutivo.

Además mencionó las dificultades que pueden producirse con los artistas: "Más allá de que los artistas hoy no tienen agenda para venir a Sudamérica en los próximos meses, hay un riesgo alto de cancelación del evento porque es importante entender que cada artista que viene al Festival de Viña tiene una tripulación de al menos 30 personas. Cualquiera de esas personas que potencialmente se enferme, todo el resto pasa a ser contacto estrecho y simplemente el show no se va a poder realizar".

También calificó como inviable que los artistas que vienen del extranjero y todo su equipo hagan cuarentenas de cinco o seis días al llegar a Chile. En ese sentido, sostuvo que los músicos no pueden hacer "burbujas" como ocurre con el fútbol, porque tienen que interactuar con los equipos de producción, asistir a ensayos.

Tras escuchar los argumentos, los concejales votaron casi por unanimidad para cancelar el evento. El único representante que rechazó la suspensión fue René Lues, quien argumentó falta de tiempo para leer con detención el nuevo acuerdo al que se llegó con los canales concesionarios.

Que no se repita

Después de la votación, la alcaldesa Ripamonti explicó que "lo que coordinamos es una comisión de trabajo que sesiona una vez al mes. Canales, comisión del Festival y la concejalía de este municipio irán mes a mes poniendo en la palestra las parrillas de todos los eventos que realiza el municipio y las parrillas de los canales para que de verdad Viña del Mar sea el principal destino del país para llevar adelante las actividades de este verano y hasta el próximo año".

La jefa municipal agregó que "algo importante es que esto no puede volver a ocurrir. Debemos tener mejores bases de licitación y que el Festival de Viña del Mar se tenga que hacer el 2023 y no solo se haga sino que sea el mejor".

En esta salida estuvieron de acuerdo los concejales, quienes valoraron que se evitara ir a la justicia para resolver la situación. "Sería bastante nefasto para nuestra Municipalidad y para el Festival que esto se judicialice, porque va a perder el valor el Festival de la Canción y obviamente en el futuro capaz que ni siquiera tengamos canales interesados en poder hacer una transmisión", sostuvo el edil Carlos Williams.

"Judicializar no es estratégico para el Municipio. No tenemos la capacidad de entrar en una pelea jurídica de esa envergadura, son muchos los recursos", añadió el concejal Alejandro Aguilera. "No podemos no tener Festival en los próximos años", enfatizó el concejal Jorge Martínez.

Como parte del acuerdo alcanzado entre los canales y la Municipalidad de Viña del Mar, se estableció que el contrato de concesión se extenderá a las versiones del Festival Internacional a realizarse los años 2023 y 2024, según un comunicado de ambos canales.

"Si tuviéramos el 35% (de la capacidad en la Quinta Vergara) tendríamos prácticamente 3.200 millones de pesos de déficit".

Marcelo Hilsenrad, Gerente de Producción Canal 13

"Debemos tener mejores bases de licitación y que el Festival de Viña del Mar se tenga que hacer el 2023 y sea el mejor".

Macarena Ripamonti, Alcaldesa de Viña del Mar

Carreras dice adiós a la Ópera de Viena y admite que su retiro "se va acercando"

TENOR. Fue aplaudido de pie por media hora y reveló el lugar de su concierto final.
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El público de la Ópera no quería el martes en la noche que Josep Carreras se fuera del escenario: 47 años después de su debut en ese lugar, el tenor español decía adiós a un teatro que, como él afirma, siempre le ha dado "calor, entusiasmo y respeto".

"Adieu und Danke" (adiós y gracias) fue el mensaje que se proyectó en el telón al terminar el programa oficial de una emotiva gala benéfica que puso fin casi cinco décadas de relación en las que el cantante interpretó más de 20 óperas distintas. Afuera, la gigantes luces de neón que adornan una de las fachadas despedían también al cantante con el mensaje "Adiós, José".

"Es una casa que adoro, que me ha dado maravillosos recuerdos y maravillosos momentos artísticos", dijo hace unos días en Viena el cantante.

Antes de comenzar la velada, el director de la Ópera de Viena, Bogdan Roscic, repasó ese largo historial.

Una bohème apoteósica

Primero, un debut con "Rigoletto" en 1974 con el que el propio cantante no quedó muy satisfecho. Tres años después, la apoteosis en forma de una "Bohème" con Herbert von Karajan dirigiendo a la orquesta y Carreras en el papel de un Rodolfo que mantuvo al público 45 minutos de pie aplaudiendo.

El martes fue un poco menos, pero Carreras tuvo que salir hasta seis veces al escenario después de terminado el programa, para saludar, volver a cantar, marcharse y volver a salir a escena ante un público que, de pie, no quería que se fuera y logró retrasar la despedida media hora más.

Otro momento especial de la relación de Carreras con Viena fue cuando cantó aquí en 1988, en su primera actuación en un teatro tras superar una leucemia que casi le cuesta y que cambió su vida.

De esa experiencia y de su agradecimiento al cariño que recibió de la sociedad y de la cura que recibió de la ciencia, surgió la labor benéfica que es el otro gran pilar de su vida, en forma de la Fundación Josep Carreras contra la leucemia, y que se manifestó también en esta gala de despedida, cuyos honorarios -de todos los artistas- una fundación benéfica austríaca que ayuda a niños con problemas de salud.

"acabó una era"

En el programa, piezas de Puccini, Schubert, Mozart y Joaquín Rodrigo, hasta la "Granada" de Agustín Lara con la que se cerró el concierto. En los pasillos, a la salida, se podían escuchar entre el público comentarios como "ha acabado una era" o "marcó la historia de la ópera".

Carreras ha recibido todos los reconocimientos que se pueden recibir en Austria: miembro de honor a perpetuidad y portador del anillo de la Ópera, Gran Premio de Honor de la República de Austria y cantante de cámara, un galardón que en su época concedía la corte de los Habsburgo y que hoy se sigue entregando sólo a las mejores voces.

Pese a que hace dicho que la despedida era algo triste, Carreras afirmó que era un privilegio poder hacerla con una gala benéfica. Sobre si ya planea su jubilación definitiva, reconoció que "se va acercando" y, aunque no sabe la fecha, su concierto final será en el Liceu o el Palau de la Música en Barcelona.