Una esperanza
La tormenta del covid-19 no ha pasado. Cada uno de nosotros debe asumir el cuidado al prójimo, pues estamos de nuevo en horas difíciles y debemos aquilatar que la vida está en juego.
Ojalá seamos capaces de entenderlo. De cómo nos comportemos hoy dependen el mañana personal, familiar y del país. Es ahora el momento de ser responsables, cuidadosos, solidarios y generosos en nuestros diario vivir.
Esta dura pandemia no da tregua y sigue su letal camino. Por eso es vital cuidarnos, hacer conciencia en nuestros entorno , en nuestras familias y amigos mas cercanos y así multiplicar la esperanza para salir de esta tragedia de angustias y de dolor.
Sentémonos en nuestro hogar, miremos lo bello de la naturaleza, no perdamos de vista eso, porque de seguro cuando todo pase nuestros abrazos volverán a tener la fe y la confianza de un mañana mejor
Arturo Goddard Bravo Profesor Normalista normalista1949@hotmail.com
Pensamientos
Algunos pensamientos al viento que nos pueden ser de utilidad. Uno: tú no tienes que ser el mejor; sólo tienes que ser tú. Dos: todo lo que tenemos es el ahora; aprovéchalo.
Tres: el pensamiento positivo es contagioso; transmítelo. Cuatro: la vida continúa; con o sin ti. Cinco: la vida es simple; pero no es fácil.
Seis: la mejor medicina es un/a buen/a amigo/a. Siete: aprovecha de reírte ahora; algún día no tendrás dientes. Ocho: hay veces que buscamos algo; y descubrimos otra cosa.
Nueve: los amigos te compran comida; los mejores amigos, se la comen.
Diez, como profe de Inglés jubilado que soy termino con una frase en ese idioma: "I am a boy" ("yo soy un niño"), oración que algunos creen que significa: "Allá me voy". Na' que ver.
Mauricio Pilleux Dresdner mpilleuxpd@gmail.com
Partidos políticos
Los partidos políticos chilenos se han visto disminuidos en sus liderazgos en el último tiempo.
Anteriormente eran referentes a nivel nacional de casi cualquier actividad política o institucional; hoy en día se han quedado como agrupaciones que reflejan ciertas posturas o proyecciones ideológicas, pero estos no marcan un ritmo definidor en la dinámica política.
Partidos tradicionales, que eran reflejo de toma de decisiones hace no muchos años, ahora están obligados a reformularse para su sobrevivencia.
El contexto político actual, si bien presenta una nueva oportunidad para las agrupaciones políticas emergentes, también ha demostrado ser excesivamente desafiante para que estos nuevos actores no sean atrapados por la rutina trivial establecida una vez que se desempeñen en puestos de representación.
Lo anterior, claro, señalando aquellos que tienen cierta ventaja, ya que en el otro lado han quedado en jaque colectividades que antaño definían procesos electorales y ahora ven con amplia distancia sus tiempos de gloria.
Javier González Barría Licenciado en Ciencias Políticas y Administrativas UdeC
Emprendimiento científico
En Chile, la falta de inversión en infraestructura y regulaciones poco flexibles limitan el emprendimiento científico desde las Universidades Estatales.
Las empresas de base científico-tecnológica nacen en su mayoría desde el postgrado, que son contratados por la Universidad o en la empresa asocian a algún académico.
Esto implica que los dueños de la empresa pasan a ser funcionarios estatales y deben regirse por la Ley de Probidad, que les impide realizar comercializaciones o relaciones contractuales por montos superiores a 200 UTM (Undades Tributarias Mensuales).
Por ejemplo, no pueden participar en licitaciones por estos montos o superiores, debiendo recurrir, necesariamente, a la inversión privada para avanzar con sus proyectos.
La mayoría de los emprendimientos científicos requieren apoyos de 5 años o más para despegar a nivel comercial.
En este escenario, es que se deben flexibilizar las normativas estatales, permitiendo, por ejemplo, que investigadores trabajen asociados a una entidad privada como parte de su jornada laboral y/o puedan elegir diferentes proveedores por servicios específicos, sean nacionales o extranjeros que cumplan con las especificaciones técnicas que requieren para ser competitivos en el desarrollo de los productos de sus empresas.
Asimismo, debemos aunar esfuerzos para que las condiciones entre planteles públicos y privados sean iguales, desarrollando alianzas que beneficien la innovación y la transferencia tecnológica, apoyado de un mayor control, si se requiere.
Fabiola Vásquez Coordinadora Unidad de Transferencia Tecnológica UFRO