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¿Cuál es la situación actual del Colegio de Pofesores de los Ríos? ¿Ha aumentado el interés de los profesores por colegiarse?
-Actualmente, el Colegio de Profesores ha ido aumentado en su número de colegiados, porque hay una gran preocupación por lo que va a venir por los Servicios Locales de Educación Pública y por ese mismo tema, los colegas están aterrorizados y asustados. Además de eso, han visto que el Colegio de Profesores es la única instancia que tienen para poder defenderse ante cualquier problemática que exista en el ámbito laboral, porque cuenta con asesoría jurídica, un directorio que los apoya y gracias a eso se han solucionado problemas en la región, con colegas que han sido amenazados con quitarles horas y otros con ser desvinculados. Sin embargo, el Colegio de Profesores ha estado ahí y los está apoyando, teniendo buenos beneficios.
¿Cómo es el trabajo que se desarrolla al interior del colegio?
-Uno cuenta con un gran equipo. El directorio regional se compone de cinco personas, quienes estamos trabajando por un mismo objetivo. Aquí nos olvidamos de listas, de partidos políticos, de credos religiosos y nuestra única misión y fin es velar por la educación y las problemáticas de nuestros colegas. También tengo que destacar el trabajo de los comunales en todo ámbito, quienes están trabajando y hacen más llevadera esta labor de dirigente regional, porque sin el apoyo de ellos no se podría llevar a cabo.
¿Cómo están desarrollando el trabajo territorial?
-La labor es demandante, pero uno se tiene que dar los espacios y también se cuenta con la buena voluntad del empleador. Por ejemplo, yo tengo 15 horas gremiales a la semana, que en mi caso son jueves y viernes, que dejo para visitar algunas comunidades, por ejemplo Futrono, San José de la Mariquina y Máfil. Hemos recorrido la región, pero dentro de los espacios que nos otorga la autoridad, porque no contamos con un fuero gremial como otros gremios, que van un par de horas a trabajar y el resto son todas para trabajar en base a su gremio o sindicato. Nosotros no. En mi caso tengo 15 horas y las distribuyo con otros dirigentes, para poder visitar las comunidades.
¿Cuáles son las expectativas que tienen con el nuevo gobierno?
-Tenemos altas expectativas. Antes habíamos tenido ministros profesores, como fue el caso de Mariana Aylwin y Yasna Provoste, dos profesoras que en su momento lo hicieron bien, pero tenemos altas expectativas con este gobierno, por los cambios que se van a realizar. Nuestra gran esperanza es que los Servicios Locales de Educación Pública (Slep) no sigan adelante. Nosotros elaboramos una propuesta que fue llevada a los constituyentes a nivel nacional, en un congreso de educación que se realizó el año pasado. Fue un arduo trabajo que se hizo con las comunas y luego a nivel regional. Se concluyó con una gran propuesta a nivel nacional, compuesta por cinco puntos, donde solicitamos que los constituyentes los puedan abordar para esta nueva constitución. Tenemos la esperanza de que estos cambios van a venir y nos van a favorecer a nosotros como profesores.
¿Cuáles son los principales cambios que pide el profesorado actualmente?
-Creemos que este gobierno sí nos va a escuchar y se van a realizar los cambios tan anhelados, no tan solo para el profesorado. Yo creo que a nivel país se pide y se sueña con un cambio en la educación. Partimos de esa esperanza, de que una vez que se tengan que ver estos cambios en la constitución, se vea nuestra propuesta y se dejen de lado los Slep, porque donde se han implementado, han sido más dolores de cabeza que gratificaciones. Entonces, el profesorado no se ha visto favorecido. Ni el profesorado, ni el alumnado han recibido lo que hemos pedido.
¿Por qué el profesorado pidió salir del sistema municipal?
-Porque vimos que estaba viciado. Es una agencia de empleo, donde se pagan favores políticos, se contrata y se contrata gente. Los ingresos no están dando para poder solventar la educación. No hemos visto que las municipalidades inviertan grandes cantidades de dinero en infraestructura de los colegios y nos hemos visto desfavorecidos con el sistema particular subvencionado, ya que si llegan los recursos, no son utilizados para lo que es plenamente mejorar la educación.
Desde el ministerio informaron que desde este año retornarán a la presencialidad. ¿Cómo asumen ese anuncio?
-Si bien es cierto el 2020 y 2021, que fueron años críticos con la pandemia, nosotros considerábamos que no se debía retornar a clases por el miedo a los contagios, después de dos años de pandemia, para los profesores ha sido estresante. Ha sido desgastante, hemos tenido menos tiempo para nuestras familias, hay muchos colegas con crisis de estrés, nosotros queremos volver a la presencialidad y hace rato que lo queremos. Nos negamos en un comienzo por el miedo al contagio, pero hoy día estamos con las vacunas todos los profesores y un alto número de alumnos también. Pero hay una contradicción, porque se han visto casos de adultos y jóvenes que con las tres dosis también se han visto afectados por el covid.