Explican protección de los humedales y porqué son claves en bienestar humano
EXPERTO. Doctor Michael Hantke, académico de Derecho USS sede Valdivia, entrega alcances de la legislación ambiental.
Chile vive un momento crítico. Esta semana se informó de la extensión del decreto de emergencia hídrica para 231 de las 346 comunas del país, lo cual representa un 67% del territorio nacional. La problemática se acentúa en los sectores rurales, donde -como precisa un informe de Fundación Amulén (2020)- el 47,2% no cuenta con abastecimiento formal de agua potable. No obstante, esta realidad no sólo aqueja a nuestro país, sino que, como estima la Organización de las Naciones Unidas (ONU), el 25% de la población mundial vive en zonas con escasez de agua.
Frente a esta carencia y el calentamiento global, se hace prioritario discutir sobre la regulación de los ecosistemas y fuentes de agua, por lo que el Dr. Michael Hantke, académico de la Facultad de Derecho y Gobierno USS, desarrolló en el Aula Magna de la Casa de Estudios en Valdivia, junto al área de Vinculación con el Medio (VcM) la charla: ¿Cómo protegemos los humedales?
"Los humedales son un espacio natural importante de proteger. Sus características hacen necesaria su regulación por el valor que suscitan", apunta el profesional.
Dimensión científica
Entre las funciones esenciales de los humedales está el almacenamiento de agua. "Son espacios que tienen vegetación hidrófila, las que capturan y retienen el agua por más tiempo. Lo que hacen estos espacios es reservar agua, como una suerte de embalse natural", detalla el Dr. Michael Hantke, quien además es consultor regional del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA).
"Otra función es la filtración de agua. La vegetación recupera algunos minerales y metales contaminantes, tratándolos y depurando. También tienen una producción biológica, son ricos en micro organismos, bacterias, peces y otros elementos bióticos, lo que significa que la cadena trófica puede sobrevivir a partir de estos espacios", sostiene.
Y agrega que "por ejemplo, en el caso de Valdivia los cisnes de cuello negro viven del luchecillo que crece alrededor del humedal, así como también encontramos otro tipo de fauna que les sirve de espacio para la migración como corredor biológico", distingue. A lo que subraya: "Las funciones de los humedales son extremadamente relevantes y es por eso que los protegemos.No es por un amor platónico por la naturaleza, sino que es porque también tiene otras dimensiones, como la científica".
Servicios ecosistémicos
En relación con los seres humanos, el abogado especialista en Derecho Ambiental y de Recursos Naturales, doctor Michael Hantke, recalca que los humedales "generan una serie de beneficios, lo que se denomina servicios ecosistémicos, que representan valor para la comunidad, al prestar a los seres humanos una multitud de beneficios, desde hábitat y biodiversidad hasta recreación, regulación de nutrientes, suministro de agua, producción de alimento y valores culturales y estéticos, entre otros".
Justamente, para entregar aún más claridad, el académico comenta que en caso del Santuario de la Naturaleza Carlos Anwandter, "la cantidad de servicios en términos comunitarios que presta al año es superior a los 125 millones de dólares, si valorizamos estos servicios ecosistémicos. Lo que tenemos en Valdivia es realmente un tesoro".
"Este espacio es demasiado grande para soslayarlo y es por eso que los protegemos (…) La configuración de un humedal es diversa, sus servicios son valiosos y hoy son centrales y críticos para nuestra vida", señala.
Legislación Vigente
En materia de protección de humedales, el primer avance en el país fue en el año 1981, al ratificar la Convención de Ramsar (1971), que reconoce actualmente 13 sitios a nivel nacional, entre ellos el Santuario de la Naturaleza Carlos Anwandter, humedal de seis mil hectáreas que se originó luego del terremoto de 1960.
Luego, en 2010 se aprobó el Reglamento de Suelos, Agua y Humedales, mientras que en Valdivia el año 2016 se establece la única ordenanza municipal del país en Protección de Humedales, hasta llegar al año 2020, cuando la Ley 21.202 "modifica diversos cuerpos legales, con el objetivo de proteger los humedales urbanos".
"Antes de estas normas, los humedales no protegidos por la Convención Ramsar eran espacios que estaban bastantes desprotegidos, porque la normativa no se hacía cargo (…) Pero a pesar de toda la protección vigente aún pueden estar en peligro", advierte.
"Cualquier actividad de las descritas en la Ley Nº 19.300, que se quiera realizar en un sitio Ramsar o en un humedal urbano necesita ingresar al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA) ¿Qué significa? Si quiero realizar un proyecto, una actividad, pública o privada, dentro de un humedal, no se puede efectuar si no se cuenta con un estudio o una declaración, y la Resolución de Calificación Ambiental favorable, dependiendo el tipo de actividad", explica.
"La Ley del año 2020 además permite al municipio postergar los permisos de subdivisión, de loteo y urbanización de estos terrenos", acota.
¿protección?
Así, Hantke concluye que "en Chile, no es que falten herramientas para proteger los humedales, lo que sí hay es una dispersión que no es propia del sector ambiental, sino que sucede en todas las áreas del Derecho y esa división hace que sea poco eficiente la protección".
Y finaliza: "En consecuencia, tenemos una serie de organismos y mecanismo que sí son efectivos en la protección de los humedales y esto particularmente a partir del esfuerzo que ha hecho el Poder Judicial y especialmente la Corte Suprema en estas áreas, para amparar el derecho a vivir en un medioambiente libre de contaminación en relación con los humedales".
"No es que falten herramientas para proteger los humedales, lo que sí hay es una dispersión que no es propia del sector ambiental...".
Dr. Michael Hantke, Académico Derecho USS Valdivia