Reconocen la trayectoria de tres funcionarias de bibliotecas de Los Ríos
PRESENCIA. Profesionales que trabajan en Valdivia y Lago Ranco fueron premiadas por labores iniciadas hace más de 20 años.
Como una forma de despedir julio, que fue el Mes de las Bibliotecas y donde se celebró el Día del Bibliotecaria y Bibliotecario, la Coordinación de Bibliotecas Públicas de Los Ríos realizó una ceremonia de reconocimiento de tres funcionarias.
La actividad fue en la Casa Prochelle Uno. En el lugar fueron premiadas las trayectorias de Juana Rosas, administrativa de la Biblioteca Pública Camilo Henríquez de Valdivia con 34 años de servicio; Filomena Calfueque, quien hace 37 años es auxiliar de servicios de la Biblioteca Pública Luis Parada de Lago Ranco; y María Victoria Vivencio, directora de la Biblioteca Pública Camilo Henríquez de Valdivia desde hace 27 años.
Además de familiares, amigos y cercanos, a la actividad asistieron autoridades regionales que destacaron la importancia del rol de las funcionarias en sus respectivas bibliotecas.
"Las mujeres somos en general guardianas de espacios de intimidad y reflexión y la biblioteca es una suerte de extensión de eso en donde como lectores nos encontramos con nosotros mismos, pero que paradojalmente también son espacios que se abren al mundo", dijo Antonia Torres, seremi de las Culturas.
En el evento también participaron Andrea Soto (administradora municipal de Lago Ranco), Cristina Rosas (concejala de Lago Ranco), Lucía Abello (coordinadora regional de bibliotecas públicas) y Erwin Vidal (gerente de la Corporación Cultural Municipal de Valdivia).
Destacadas
Juana Rosas es valdiviana. Trabaja en la biblioteca desde 1988, cuando aún funcionaba en el segundo piso de la municipalidad. Es la encargada del programa BiblioRedes, que capacita en tecnologías de la información a través de diversos talleres de computación y alfabetización digital. "Es emocionante contribuir con la realización de las personas, por ejemplo, al crear un correo electrónico o encontrar algún trabajo. El contacto permanente con el público me encanta porque es un aprendizaje constante", dijo.
Filomena Calfueque nació en Lago Ranco. En 1978 comenzó a trabajar como auxiliar de la escuela y siete años más tarde fue trasladada a la biblioteca donde se ha desempeñado como auxiliar de servicios. "Estoy muy emocionada por este reconocimiento porque jamás me lo esperé. Realizo mi trabajo con mucho amor y siempre con el apoyo de mis hijas, nietas y nietos", dijo.
María Victoria Vicencio es paillaquina. En 1982 ingresó a la carrera de Pedagogía en Historia y Geografía en la Universidad de Los Lagos, sede Osorno. Trabajó como profesora en el Rodulfo Amando Phillipi y en 1995 ingresó a la biblioteca a cumplir un reemplazo. Le correspondió impulsar el proyecto de mejoramiento integral del servicio con trabajos que finalizarían en 2004. Fundación La Fuente sería el principal apoyo para la habilitación de toda la casona donde funciona la biblioteca en Avenida Picarte.
De su trabajo destaca el contacto permanente con la comunidad y la calidad humana de su equipo.